domingo, 4 de enero de 2009
Detrás de la cruz está el diablo
Respecto a la polémica de si quitar las cruces de los lugares públicos, no puedo estar más a favor. Ese instrumento horrible en el que matarón a Isa bin Mariam (Jesús para los cristianos) me parece un horror. Es la única religión en el mundo que tiene por símbolo un instrumento de tortura, cosa que es incomprensible para los orientales, por ejemplo. Yo las cogería todas, haría una pira y las quemaría todas. Ellas, con sus Cristos sangrantes, poblaron de pesadillas mis sueños infantiles.
Cambiando de tema, si yo hubiese tenido hijos,,jamás, ya desde que empezaran a tener uso de razón, dejaría que creyeran en los absurdos Reyes Magos, Papás Noeles y otros mamarrachos. Me parecería que haciéndoles creer eso, y viendo sus caras ilusionadas, les estaba haciendo una putada. Les haría regalos, y les abrazaría y besaría, cosa que mi madre nunca hizo conmigo. Yo sería una de esas madres-pulpo, que cuendo me vieran mis hijos, saldrían corriendo despavoridos. Pero gracias a Dios no he tenido ninguno. Un hijo es una trampa de la Naturaleza. Y la gente empeñada en tenewr hijos. ¿Para qué? a mí nunca me han hecho falta, únicamente para que heredaran mi biblioteca. Pero un hijo cuesta caro, te da malas noches, hace ruido, molesta, te sale por un huevo, que si los coles, la ropa y todo el folklore. Te amargan la juventud y no puedes hacer nada, solo estar pendiente de ellos, a menos que seas millonaria. Se acabaron los viajes, los caprichos y todo lo que alegra la vida. Y eso en el caso de que te salga bien y no sea un psicópata que acabe matando a sus compañeros o a los padres. Si sale tirando a normal, cuando tiene la edad, se ennovia, cosa natural, y si te he visto no me acuerdo. Acaba con tu dinero, con tu tranquilidad y con tu juventud. Que tengan hijos los idiotas. Además ahora los nenes están aprendiendo la fuerza que tiene, y mira lo que ha pasado con esa pobre madre sordomuda, que por pegar una bofetada a un hijo insoportable, va a ir a la cárcel.Cuando yo era pequeña, mis mayores, padres educadores y todos los relacionados con la clericalla, me machacaron, me humillaron y acabaron con mi salud. Ahora es al revés. Yo admiro a los espartanos. Esos sabían hacerlo. Niño que nacia tonto o contrahecho, lo tiraban por la roca Tarpeya, y así tenían la juventud más sana del mundo antiguo.Y respecto al aborto, si yo cuando era la hora hubiera sabido que llevaba dentro un monstruíto de esos que inspiran tanta ternura y tanta piedad, y a mí me dan asco, no lo hubiera dudado y hubiera abortado. Prefiero mil veces a los perros, gatos, hamsters y demás animales domésticos, que no te hacen sufrir, solo cuando mueren, no tienes que pagarles estudios, no se estrellan con una moto en la carretera, te quieren de verdad y no por el interés, salen mucho más baratos y encima te hacen compañía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario