Palma, 22 de noviembre de 2005
Hoy La Otra me ha llamado para hacer las paces, y las hemos hecho, pues yo no soy capaz de pegar una patada a quien me ha ofendido, si luego se disculpa. Menos mal, porque tenía un disgusto de narices. El primer dia, anteayer, fué de rabia, y ayer de pena.Yo le tengo cariño a esta amiga, que es tan animalera como yo. Es inteligente y tenemos muchas cosas en común. Además, cosa rara en los mallorquines, posee un vocabulario muy extenso. y rico. No creo que sea por haber ido al Sagrado Corazón. A lo mejor se lo mando y se cabrea por este párrafo, pero ya se le pasará. De todas maneras, mis lectores apenas o nada se conocen entre sí., y menos a ella, que se mueve en otros ambientes.
No hay mal que por bien no venga, como dijo Franco cuando los de la ETA hicieron volar a Carrero por los aires, asegurándole el paraíso eterno, pues salía de misa confesado y comulgado. Frase críptica donde las haya.,la del invicto. Y lo digo , lo del mal, porque ayer, cuando estaba tan desesperada (yo soy muy exagerada en todas mis manifestaciones, ya lo habréis notado), pues entonces llamé a Maribel Almansa, a la que conozco del PC desde hace 20 años o más. Le prupuse salir una vez al mes y le pareció de perlas, y ahora tengo una amiga más. Pero me parece que esto ya lo habia contado.
He decidido tomarme por lo menos una semana sabática, sin salir de casa, como el oso en su osera, pues no estoy bien. Estoy muy cansada y tengo mal cuerpo. Todo lo que como me cae mal, solo puedo tomar yogures, lecha, fruta y verduritas, pues lo demás me sienta como si tragase perdigones.
Una vez me preguntó Maria Antonia, aquella compañera de la Conselleria que murió degollada, que cuánto me pagaban por trabajar en el Partido. Yo me quedé asombrada y le dije que nada, que era yo que pagaba mi cuota. Se echó a reir y me llamó tonta. Desde entonces la desprecié. No me caia mal, pero era una insensata, y así acabó como acabó. Ya lo conté, se separó del marido porque ella se iba de marcha sola y tenía un seguro de vida de un montón de millones. En el ínterim del divorcio el marido se desnucó, y se llevó toda la pasta. Entonces empezó a juntarse con toxicómanos y señores mayores pudients que le hacían regalos. Recuerdo que tenía unos pendiente maravillosos de oro y piedras preciosas, de un diseño muy moderno. Ella me envidiaba los míos de la rosa. Yo siempre le decía que me gustaban mucho, y me dijo si los quería. Le dije que esas cosas no se regalan así como así, y que después se arrepentiría, pues aunque las otras la odiaban porque vestia muy bien y tenia dinero, yo la apreciaba y me hacía gracia. Una vez tenia un Rolex carísimo, y para que lo viera ,lo lanzó desde su mesa sobre el mostrador donde estaba yo. No creo que este trato le sentara muy bien al reloj, pero es que Maria Antonia era así. La individua perfecta para morir degollada.
Cambiando de tercio, tengo desde hace poco tiempo un visitante nocturno. Es un gato fantasma, que se viene a dormir a mis pies. Ya sé que tomaréis esto como una locura, o, si sois benévolos, una boutade. Pero yo no miento. Shakespeare (perdón por la pedantería), que no era tonto, decía aque llo de “así es si así os parece”, y creo que estaba en lo cierto. Yo solo tengo un conocimiento empirico de la cosa del gato, que voy a contar ahora.
Yo por las noches acostumbro a dormir con la puerta del dormitorio entornada, porque me gusta que de noche entren Loli o Chenta y se paseen a mi alrededor, jueguen, y muchas veces se suben a la cama a dormir conmigo. La que más duerme conmigo el Chenta, la negrucia. Esta gata me quiere,pues me lo demuestra aunque tenga la tripa llena. Se sienta en mi halda, luego se hace un ovillo y estira una pata sedosa y negra hasta tocarme las narices. Este gesto me hace mucha gracia, y nunca me ha arañado. Mis animales nunca han arañado. Todo esto viene a que Chenta suele ser mi compañera nocturna, pero desde hace algún tiempo tengo otro huésped. Cuando una de mis gatas sube a la cama, yo en lo oscuro lo noto, pues pesan seis kilos, y se nota que saltan y luego se hacen un ovillo a mis pies. Pues ultimamente notaba que saltaba un gato, pero más suavemente, como más ligero, y también se echaba a dormir en el mismo sitio de Chenta. La primera vez pensé que era ella, y encendí la luz, pero allí no había nada. Varias veces me ha pasado, que he notado perfectamente que un gato se sube en mi cama y se acurruca a mis pies, y enciendo la lamparita y allí no hay nada. Entonces apago, y le digo: Bienvenido, Michi. Michi es mi tercer gato, un gato fantasma que habita esta casa. Me gustaría verlo, por si fuera alguno de los anteriores de mi vida, u otro que antes hubiera vivido allí. No sé. Esto es lo que hay y a mí me gusta, aunque no se deje ver. Cuando está él, no vienen ni Loli ni Chenta.
A mí si me molestó tanto que mi amiga se metiese con los comunistas fué porque yo quiero al Partido, me dejaría hacer pedazos por él. Me ha dado mucho más él a mí que yo a él. Ya lo dije. No sé por que,. pero quiero que esto quede claro. Jamás me he arrepentido de haberme afiliado, como no me arrepiento de haberme hecho musulmana. No tengo el arrepentimiento fácil. Yo soy muy camaleónica y adaptable, y puedo conjugar ambas cosas, y muchas otras más. Pero nunca he sido una buena comunista, como no soy una buena musulmana. Pero si estoy a gusto así ¿por qué cambiar? .
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