La ensaimada es el postre mallorquin por excelencia. Es antiquísima. Se piensa que es de origen árabe o judío.Pero está hecha con manteca de cerdo, y no creo que fuera cosa de árabes.Cuando yo veo a esos turistas que se llevan a su casa las ensaimadas pienso que cuando las coman no serán realmente buenas; como están estupendas es recién hechas, aún calentitas...O al menos, del día.Entonces sí que están para chuparse los dedos. A mí las que más me gustan son las que solo se hacen por Cuaresma, llamadas "de tallades" (de tajadas), porque llevan trozos de sobrasada, calabaza y mucho azúcar, que se hace uns costra encima de la sobrasada y toda la ensaimada, y son exquisitas, pero engordan mucho. Pero una o dos veces al año, no hacen daño.Yo a estas cosas no quiero renunciar. También un postre típico a más no poder es el helado con coca de almendras. Se sirven dos bolas de helado normales, del sabor que se quiera, generalmente de avellana o vainilla, y al lado se pone un trozo de coca de almendras, la que aparece en la foto. ¡Que está de miedo!. La coca admite muchas variedades. También la hacen con nueces, pero como la almendra es el fruto seco que más abunda en la isla, casi siempre te sirven esta, que es lo típico.
Otra cosa curiosa y que poca gente que no viva en Mallorca sabe, es que, y esto sí que es un resabio judío, el pan llamado "de payés", esos panes redondos de kilo, que se corta en rebanadas y es el mejor para la sobrasada y en pa amb oli (pan con aceite), está hecho sin sal, lo que lo hace particularmente sano.
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