(espiritus delicados abstenerse)
Yo soy como vil gusano,
sabandija hedionda
gusarapo repugnante
que se arrastra por el suelo,
entre gargajo de abuelo
y el cagarrón redondo
del perro que se alivió.
Yo proclamo mis miserias
al mundo entero (casi) espantado,
que se siente acojonado
al leer cosas tan serias.
Yo digo frecuentemente:
Lo que escribo siempre es cierto,
pero nunca está encubierto
como la gente decente
hace, y hace bien, sospecho,
pues quedan muy bien ocultas
las granujadas, las culpas,
las propias y las ajenas,
las miserias y las penas,
y otros actos de desecho.
Pero como no tengo vergüenza,
escribo lo que me sale
de mi arco del triunfo
asustando a buenas gentes
con escritos repelentes
pero así me siento a gusto
aunque os dé más de un susto,
y sienta satisfacción
en descargar mis miserias
pues en este mundo cruel
muy pocas cosas hay serias.
F I N
:
No hay comentarios:
Publicar un comentario