lunes, 20 de julio de 2009
Misterios sin resolver
Hoy voy a contaros una cosa aunque sé positivamente que os vais a reír de mí, y, como ya tengo fama de chiflada, cosa cierta y asumida por mí, no me importa. Pero tengo ganas de contarla porque no lo he hecho nunca hasta ahora. En otras ocasiones relaté experiencias extrañas que había tenido: Cuando era pequeña veía luces donde no debía lucir nada, rascaban detrás de la cabecera de mi cama, el episodio de la cabina del barco, y otras muchas cosas más sin explicación. Pero hay una que trajo de coronilla al pobre señor de Casa Vila, una casa de fotografía de la que yo era clienta antes de tener una maquina digital.
Yo había comprado hacía poco una camarita de esas pequeñas, químicas las llaman ahora, , las de toda la vida, vaya, muy cuca y chica. Me hacía unas fotos estupendas. Cuando mi madre murió vinieron a Palma mi tía Kika y mi prima Pilar, a dar el pésame a mi padre. Mi progenitor, con su habitual savoir faire, las mandó a las dos a tomar viento, y entonces Paco y yo las llevamos de paseo por Palma. Paco me parece recordar que nos llevó con el coche a alguna parte, no recuerdo dónde, pero lo curioso fué el paseo que dí yo con ellas por Palma. Fuimos a ver la ciudad antigua y la c atedral. Yo estuve haciendo fotos, y, repito, esa cámara nueva siempre me había funcionado a la perfección. Pero cuando revelamos las fotos de ese paseo aparecía en todas ellas una mancha blanca alargada y vertical que el pobre Sr. Vila no se explicaba qué demonios podía ser. Dijimos que habría entrado luz en el carrete.Había otras fotos en la cámara hechas antes de que vinieran mis parientas y habían salido normales. Pero las que hicimos entonces no. Luego hice más fotos con esa cámara y nunca más apareció la mancha blanca en ellas. Yo , me parece recordar que le dije a Pilar que las fotos habían quedado mal,. Todo el carrete lo tuve que tirar, porque era una porquería. Yo luego he pensado que podía haber sido mi madre, que quería estar presente en la sesión, o fastidiarnosla. El Sr. Vila hizo pruebas con esa máquina, y no entraba luz por ninguna parte que justificase esa mancha blanca y alargada, que siempre estaba al lado de las figuras. Luego, cuando se marcharon, seguí usando la cámara, y nunca más apareció la mancha ..Yo lo comenté con Vila y estaba que se tiraba de los pelos, decía que aquello no tenía explicación, que no entraba luz en la cámara, que la habia probado, y que cómo era que ahora ya me salían bien, y antes tambien, Solo ese día por la Palma antigua. Todas se echaron a perder.
Yo ni quito n i pongo rey, solo explico lo que pasó. Nunca más me ha vuelto a ocurrir.
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