es el nombre de este cuadro, y en su día fué objeto de polémica porque no se sabe bien si se trata de una escena de dos amantes o de una violación. Ella parece muy interesada en conocer mejor a su pareja, mientras él echa el cerrojo de la habitación porque entonces no se ponían letreros de "no molesten". A mí ella no me parece muy asustada, y la primera opción me parece la correcta. De todos modos, el cuadrito tiene su morbo... y siento no acordarme del nombre del artista, que no es demasiado conocido.
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