Malditos pulgones

Para acabar con los pulgones, que destrozan los brotes jóvenes y no dejan que se abran las flores, lo mejor sería comprar mariquitas. Sí, no es broma. En España no es posible,pero en muchos países europeos se compran en los viveros y jardineros. Además de ser bonitas, se zampan los pulgones en un santiamén. Para ellas es como comer yemas de San Leandro (también son amarillas)(¡hay que ver, qué burradas pongo, pero es verdad). Pues si no se pueden conseguir las maris, si se ponen unas gotas de lavavajillas en un pulverizador y se mezclan con agua y luego se pulverizan las plantas con esto, va bien. Yo con los sprays comerciales no he conseguido nada. Acabo cogiendo un trapito húmedo y los quito a mano.
Para las babosas, que también hacen destrozos, lo mejor es la cerveza. Les chifla, como a los caracoles, y se la beben, se emborrachan y se ahogan. Poned cerveza en un plato sopero. No es un chiste.
Un abono muy bueno son las pelas de frutas y verduras, cortaditas finas.
Para evitar que los gatos estropeen las plantas, poner alrededor pimienta en polvo. No les gusta nada.
Para hacer un esqueje de geranio, hay que cortar, mejor con un cuchillo, por debajo de uno de los botones por donde salen las hojas, que previamente se habrán quitado. Esto es lo que debe quedar bajo tierra, pues de ahí salen las nuevas raíces.