viernes, 2 de octubre de 2009

Ya me he aprendido todas las oraciones preceptivas en árabe, y puedo leerlas en el Corán sin traducción. Además, ya dije que hay que decirlas en árabe, incluso aquellas personas que no conocen esta lengua y no saben lo que están diciendo, porque si no no valen. Son unas oraciones larguísimas, pero como yo siempre he tenido facilidad para los idiomas rarillos, pues no me ha costado mucho trabajo. Y eso que no rezo lo que debiera, que si lo supieran en la mezquita me reñirían. Hay que rezar cinco veces al días. Al amanecer, y esto me es fácil porque yo a las cinco de la mañana suelo despertarme para tomar mi Cola Cao y dar de comer a mis niñas, y luego rezo, después hay que hacer las de la mañana, luego las del mediodía, y luego las de la tarde y por ultimo las de la noche antes de acostarse. Las más largas son las de la tarde y noche. La más cortita, la de la madrugada. Tengo una alfombrita de oraciones que me regaló Amina cuando me convertí y la pongo mirando hacia el este, a La Meca. Son la mayoría alabanzas a Dios, y la que no consigo aprenderme es la del final, que habla de Abraham y de Mohamed (Mahoma), y dice que sean benditas sus familias, y les hace elogios y loores.
A mi rezar por Mahoma (Mohamed) no me importa, porque era un tío enrrollao, que era simpático, le gustaban mucho los gatos, las mujeres, y además era alto y cachas. Eso de los gatos nadie lo sabe, pero en los países arabes se aprecia a los gatos porque, aparte del Corán, que es el libro revelado directamente por Dios a Mohamed, están los llamados “hadices”, que son como anécdotas piadosas de la vida del Profeta. Y es ahí cuando a veces hace referencia a los gatos y los perros, y se cuentan historias de personas a las que fueron perdonados sus pecados por haber sido compasivos con los animales. Esto me va cantidubi y Mohamed me cae bien, pero el rezar por Ibrahim (que es Abraham, el de la Biblia, es que estos tres pueblos del Libro, cristianos, arabes y judíos, se odian pero son lo mismo) pues rezar por Abraham ya no me hace tanta gracia, pues me cae muy mal. Era , a mi modo de ver, un sinvergüenza de siete suelas. Cuando estuvo en Egipto iba con su mujer, Sara, que era guapa, y como el Faraón la miraba con ojillos codiciosos, se acojonó y pensó que a lo peor le haría matar para acostarse con su esposa, y entonces el muy asqueroso, pues no hay otra palabra, le dijo al Faraón que Sara era su hermana, pues estaba cagadito de miedo. El Faraón de acostó con Sara. Luego se enteró de la verdad y se enfadó mucho con Abraham, y se lo reprochó diciéndole que si hubiese sabido que era su mujer nunca se hubiese acostado con ella. El Faraón era más honrado que Abraham, que demostró ser un cornudo caguetas. Todo esto no me lo invento yo, que está en la Biblia, pero claro, no puedo decirlo en la mezquita porque se escandalizarian. Yo creo que esta última oración por Abraham no acaba de entrarme por la tirria que le tengo. De lo que pensó Sara y de las comparaciones que hizo casi seguro, no se menciona nada en la Biblia, naturalmente. Las mujeres eran como ganado. Pero si se lo pasó bien con el Faraón, debió de quedarse muy a gusto y pensando:”Cornudo, has tenido tu merecido y yo me lo he pasado pipa”. Bueno, la verdad es que yo no puedo imaginar lo que pasó por la cabeza de Sara, pero lo he pensado bastante.
Mohamed dijo que se podían tener hasta cuatro esposas, pero él tuvo como dos docenas. Y es que para eso era el Boss.La primera fué la ricachona Jadiya, la caravanera, y la última Aisha, que fué la que más siguió su camino y sus enseñanzas. Pero el que contaba era Ali, el marido de Aisha, porque Mohamed no tuvo hijos varones. Todos se le morian nada más nacer. Ali fue su sucesor, y de ahí viene la división entre las diferentes familias musulmanas, pues los sunnitas, a los que pertenezco, piensan que el sucesor legal fué Alí, pero los chiítas, que son los más fanáticos y los de los atentados, esos piensan que los sucesores del Profeta son Abu Bekr y otros compañeros suyos. Después están los ismaelitas, pero ahi ya me pierdo.Y los sufíes, que son los místicos del Islam, y tienen un tufillo a herejes. Coinciden en muchas cosas con l os taoístas. Los famosos derviches giradores lo son. Desde luego, los musulmanes aprecian (tampoco se pasan) a los animales más que los cristianos, que en la Edad Media no dejaron un gato vivo porque creían que eran el demonio y por eso vino la peste negra, porque las ratas proliferaron tanto. Tuvieron su merecido. En esto la Iglesia tuvo mucho que ver. Pues la religión musulmana dice que en el Paraíso, que es como un jardín, alli podremos tener a nuestros animales terrenos a los que quisimos. Esto me gustaría que fuera verdad, pues eso sí sería un verdadero paraíso, estarle rascando a un tigre detrás de la oreja, por ejemplo, y que te ronronease RONRONRONRON.¡Ah1 Esto sí que sería la felicidad completa para mí, y volver a estar con todos los bichos de mi vida, perros, gatos y pájaros. Y algunas personas también. No son tontos estos musulmanes, no. Lo unico que me gusta del polaco papal es que dijo que los animales tenían alma, pero los medios de comunicación casi obviaron la noticia, porque no interesaba. Yo también lo creo. Y además, en el Islam es obligatorio casarse, como en el judaísmo, y por eso creo que Jesús estuvo casado y tuvo hijos, y que los Evangelios han sido expurgados y manipulados por los primeros padres de la Iglesia. Todos los judíos (y judias) tenian que casarse. Por eso estaba permitida la poligamia. Y también me dijeron una vez en la mezquita, que cada orgasmo (legal, por supuesto) era como una oración a Dios.Y que, ya en el Paraíso , los orgasmos duran ¡25 años!. Desde luego, he mejorado cambiando de religión.

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