El reforzamiento de las defensas inmunitarias pasa por un buen sueño. Este nos permite recuperarnos física y mentalmente.Los médicos recomiendan 8 horas de sueño como media, pero depende de cada persona. Lo esencial es despertarse descansado. Si se ha dormido mal, es muy bueno hacer la siesta.
Esto de la necesidad de sueño tiene su aquél. Por ejemplo,yo soy una gran "dormidora", y necesito 10 horas por lo menos para estar en forma. Mi madre, con 5 horas, ya podía ponerse en marcha. D. Miguel de Unamuno era también un gran "dormidor". Necesitaba nada menos que 12 horas diarias. Una vez que alguien se burló de esto, el escritor le dijo:"-Sí, duermo mucho, pero cuando estoy despierto, estoy mucho más despierto que usted"
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