El tabaco es un desastre

Aunque muchos lectores fumadores pensarán que soy una plasta, a mí me parece muy bien que cada vez se prohiba más fumar en público. Yo solo lo he hecho una vez en la vida. Tendría unos 10 o 12 años, lo probé y lo encontré tan malo que lo dejé y nunca más. Pero he tenido la mala suerte de ser una fumadora pasiva. Siempre viví rodeada de fumadores. En mi familia, en el trabajo, entre mis amigos. Y el resultado es que tengo bronquitis crónica, sin haberlo tastado ni disfrutado. ¡Es bien triste la cosa!. Además todo el mundo sabe que entre los fumadores hay muchos más casos de cáncer de pulmón que entre los que no lo son. Y además, y esto interesa a todo el mundo pero más a las mujeres, las fumadoras tienen una piel bastante echada a perder. Han perdido la luminosidad. El cutis se vuelve opaco y salen arrugas tempranas. La combustión del tabaco emana productos tóxicos que, una vez inhalados,penetran directamente en el organismo. Uno de ellos, el monóxido de carbono, sustituye al oxígeno en los glóbulos rojos. La sangre se oxigena mal y todos los órganos sufren las consecuencias, y también la piel. Se vuelve frágil y pierde la luminosidad. Además de tener mala cara, el tabaco acelera el proceso de envejecimiento de la piel y el chupar el cigarrillo hace que salga en famoso "código de barras" alrededor de los labios.
Las mujeres sufren con el tabaquismo más que los hombres:
-Agravación de las enfermedades inflamatorias intestinales.
-Cancer de mama, sobre todo si se ha empezado a fumar en la pubertad.
-Cancer de ovarios y de colon.
-Menopausia precoz.
-Arterioesclerosis precoz.
Muchas de estas cosas tambien sirven para los hombres. Pero no todo es tan malo. Aunque se esté fumando desde hace 30 años, si se para de hacerlo, se obtienen muchos beneficios. La presión arterial se normaliza enseguida. El monóxido de carbono en sangre es reemplazado por el oxígeno. El peligro de enfermedades coronarias disminuye. La sangre se vuelve más fluida, los pulmones resisten mejor a las infecciones, y en general se siente uno mucho mejor. Es difícil, pero vale la pena.