viernes, 9 de julio de 2010
Martín Lutero
"Yo no puedo ni quiero retractarme de nada, puesto que no es prudente ni recto obrar contra la conciencia"
En el año 1500 prácticamente toda Europa había abrazado el cristianismo. Aunque los reinos independientes de la Edad Media se dedicaban a pelear entre ellos, rezaban al mismo Dios. Tras la caída del Imperio Romano, en el s. V, la expansión del cristianismo se aceleró, llegando finalmente hasta Inglaterra, Francia, Alemania, Rusia y Escandinavia. La cristiandad medieval, la comunidad de creyentes, se extendía desde los campos de olivos de Italia hasta los fiordos de Islandia. (en Islandia también hay fiordos, no me he equivocado)
Sin embargo, esta aparente unidad ocultaba una insatisfaccion creciente frente a la Iglesia. Los horrores de la peste dejaron a muchos europeos sumidos en la desilusión, pues no alcanzaban a comprender por qué Dios permitía la muerte de tanta gente. El renacimiento supuso un reto para las enseñanzas tradicionales del cristianismo. Y la corrupción y venalidad de la Iglesia romana, por su parte, consternaron a algunos de sus más acérrimos creyentes.
En 1517, un clérigo alemán que se contaba entre aquellos que sentía esa frustración y que se llamaba Martín Lutero clavó un documento en la puerta de la catedral de Wittenberg. Este documento recogía sus 95 tesis, una acusación mordaz del liderazgo del Papa y del estado general de la Iglesia católica romana.
Una de las principales acusaciones que hacía Lutero era que los líderes de la Iglesia residentes en Roma se habían vuelto decadentes y ambiciosos. En aquel tiempo el Papa estaba vendiendo indulgencias a los seglares pudientes para financiar la construcción de una catedral nueva. Una indulgencia es un perdón oficial de los pecados del comprador:La práctica de vender el perdón al mejor postor ofendió profundamente a Lutero.
De manera inmediata, este gesto provocó un importante cisma en la cristiandad europea. Las críticas de Lutero a la Iglesia encontraron un público receptivo en muchos lugares de Europa. Los seguidores del alemán fueron llamados protestantes y rechazaron la autoridad tradicional del Papa enmarcados en un movimiento religioso llamado La Reforma. En unos pocos años, Inglaterra y otras muchas bolsas de población del norte de Europa habían rechazado el liderazgo papal, dejando así el continennte dividido por fronteras religiosas.
El pontífice declaró hereje a Lutero y estallaron guerras entre los católicos y los seguidores de este último. Ese conflicto se prolongó de manera intermitente durante un siglo hasta la firma de la paz de Westfalia en 1648. La revuelta de Lutero contra Roma acabó para siempre con la unidad religiosa de Europa occidental.
El rey de Inglaterra Enrique VIII en un principio se opuso a Lutero, pero acabó rechazando el catolicismo en el año 1534 cuando el Papa se negó a concederle el divorcio de su mujer, Catalina de Aragón. Se proclamó Jefe de la Iglesia de Inglaterra, y los soberanos de la isla siguen sus pasos.Es la Iglesia Anglicana.
En 1522 Lutero tradujo en Nuevo Testamento al alemán en tan solo 11 semanas, ofreciendo así a sus compatriotas la primera oportunidad de leer el libro sagrado en su propio idioma.
Los católicos han sido siempre un poco reacios a que sus fieles la lean. Yo recuerdo bien que de niña la leía, pero en el colegio no querían ni verla, y tenía que leerla en casa y la encontraba muy entretenida. Contribuyó grandemente a mi educación sexual.
Desde luego, la Iglesia Católica va de cráneo. Pienso que no se ha rehecho desde los tiempos de la venta de indulgencias. Ya es que ahora las excomuniones y los cismas están así como pasados de moda, pero es que lo de la Iglesia tiene delito, como la turbia historia del Banco Ambrosiano, la extraña muerte de Juan Pablo I y ahora los delitos de pederastia que salen a la luz a diario.
Según las profecías de Nostradamus, que ha acertado bastante -por ejemplo, auguró que los árabes se enfrentarían a Occidente y lo combatirían, ayudados por los chinos- (esto último no ha pasado todavía, pero todo es posible). Pues esto de que los árabes combatiesen a Occidente hasta hace poco era inverosímil.Pero vaya si ha sido posible. Y lo que te rondaré, morena. Y Nostradamus dijo también que este Papa de ahora sería el penúltimo, y luego vendría otro -un tal Pedro el Romano- y luego iglesia católica kaputt. Veremos. Desde luego, la parroquia se le está yendo como el agua de un cesto.A la iglesia solo van ya cuatro viejas, y cuando éstas se mueran, no sé lo que va a pasar.
Fotos: Lutero, y Enrique VIII en plan chulo.
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