domingo, 8 de agosto de 2010

Las malas impregnaciones o El Vaticano da miedito



He estado varias veces en el Vaticano, y siempre me ha producido la misma impresión. Hay maravillas, pues está lleno de obras de arte fabulosas, y es precioso, pero me da mal rollito. Yo soy muy sensible a las malas o buenas vibraciones de los lugares, y el Vaticano las tiene francamente detestables. Vas pasando por las preciosas estancias de los Borgia (que eran Borja, españoles de Gandía)y por todas las demás, y sientes que aquello es cualquier cosa menos un sitio santo. Se nota (tal vez es que tengo demasiada imaginación) que allí han pasado "cosas", y no precisamente en el Renacimiento o antes. Que "están pasando". Vamos, que el Vaticano es para mí cualquier cosa menos un lugar santo, que transmita paz y recogimiento. Hay sitios que sí lo transmiten, pero ejemplo, Covadonga. Este es un sitio de buenas vibraciones.O el Monasterio de Poblet. En cambio, Lourdes no. Los castillos, y me gustan una barbaridad, no las suelen tener muy buenas, pero el que se lleva la palma en mal rollo que da es el Castillo de los Conden de Flandes, en Gante. ¡Madre mía, que sitio para tener pesadillas!. Los monasterios suelen tenerlas bastante buenas. Por ejemplo, Silos, Montcassino, Lluc en Mallorca...
Nosotros (Paco y yo) viviamos hace años en un piso alquilado que las tenía malísimas. No sé qué diantre habría pasado entre aquellas paredes, que pasaban cosas raras. De pronto en el recibidor se ponía a oler a mierda que era como demasiado. En cambio, ibamos al baño y allí no olía a nada. No había tuberías que pasasen por allí, ni filtraciones, ni nada. En el descansillo tampoco. Pero en el recibidor apestaba a cloaca. Estaba así un par de días y luego se iba.
En el atico en que vivimos ahora, y que es nuestro, siempre hay buenas vibraciones. La familia que lo ocupaba antes solo estuvo un par de años y eran gente sanota, y no murió nadie allí. Eso de morir gente, si mueren tranquilamente no pasa nada, pero si el deceso ha sido un poco de mal rollo deja unas malas vibraciones que pa qué. Pues nuestra casa, y me es igual que os riáis, tiene muy buenas vibraciones, porque nosotros somos gente positiva y mis gatos y otros animalitos han estado bien cuidados y felices. A veces hasta nos asustamos de tan buenas impregnaciones, porque de pronto se pone una habitación a oler a flores sin que las haya y no provenga el olor de la terraza ni de mis perfumes, y yo le digo a Paco que eso es que somos tan buena gente que ya "vivimos en olor de santidad". (es broma, jeje.)
Pues sí, el Vaticano no me parece sitio recomendable. El Apocalipsis dice: "Cuando veáis a la Bestia instalada en el lugar sabrado, pensad que el fin de los tiempos está cerca". Y es que todas las predicciones, las de los mayas, Nostradamus, San Malaquías, etc. etc. se están cumpliendo. En el Apocalichi dice que el sol abrasará, que los mares lo inundarán todo, que proliferarán enfermedades extrañas y que la guerra asolará la Tierra. Y otras cosas más, sorpendentemente modernas. Me parece que es San Malaquías quien dice que los árabes se unirán para destruir Occidente, cosa que hace unos años no tenía ningún sentido,pero ahora sí. Y eso de que las aguas subirán y lo anegarán todo, y que el sol nos achicharrará, con lo de la capa de ozono está más que explicado. Y también está profetizado que los chinos y los árabes se unirán para cargarse al corrupto Occidente.
A mí, todas estas cosas, me da igual que sean ciertas o no, pues estoy a verlas venir, y pienso que es más entretenido morirse en una gran catástrofe mundial que en una triste cama de hospital.
Hélas, hélas, hélas, como dicen nuestros vecinos gabachos, que tanto nos admiran y nos quieren.
Amén, Amín. (esto último es amén en árabe)
Allah Akbar. (Dios es grande)(y hace lo que le da la gana)
Faltaría más.

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