En estos días en que la mitad de la población mundial muere de calor y la otra mitad de frío, es buen momento para hablar acerca de cuál es la temperatura más alta y la más baja que puede alcanzar un objeto.
Hoy hablaremos de la más alta, pero antes vayamos a las definiciones:
- La temperatura es un concepto que se usa de forma cotidiana para referirse a la energía interna de un cuerpo, energía que varia según la velocidad del movimiento de sus moléculas y átomos. Cuanto mayor sea la velocidad a la que se desplazan y chocan entre sí sus partículas mayor es la temperatura del objeto.
Pero además, cuando se calienta algo, suceden otros fenómenos: si es un sólido se transforma en líquido, entonces las moléculas se mueven de forma más libre y aumentarán más su velocidad hasta que el líquido se trasforme en gas.
Por otra parte, a medida que la temperatura de un objeto aumenta, las moléculas, debido a que chocan entre sí, se van rompiendo. Allí comienzan los problemas: a determinada temperatura los átomos también se romperán, dando como resultado un fluido de electrones y fragmento atómicos de inaudita temperatura que es llamado plasma y que algunos califican como el cuarto estado de la materia (mucho más común de lo que se podría pensar, ya que plasma es el estado de la materia del interior de las estrellas, por ejemplo).
Como decíamos, a medida que las partículas se mueven a mayor velocidad la temperatura aumenta, pero, como se sabe, la Relatividad y la Física cuántica establecen un límite de velocidad para los objetos, los famosos 300.000 Km por segundo de la velocidad de la luz.
Velocidad a la que según Einstein un objeto se puede aproximar pero JAMÁS alcanzar. Si algo alcanza esa velocidad, entre otra cosas, deberá tener un peso infinito, así que esa temperatura es inalcanzable y/o parte de las especulaciones de los físicos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario