miércoles, 11 de abril de 2012
El Salvador-Asesinato de Monseñor Romero, por ser un cura que siguió la doctrina de Jesus y del Evangelio
Al Arzobispo Romero le asesinaron, como a Jesús, por decir las verdades en público, por defender las enseñanzas del Evangelio. Los fariseos que buscaron su perdición fueron los gobiernos de derechas y los grandes terratenientes que le odiaban por ser "comunista". Murió mártir, pero el Papa, ningún Papa, consideró por un momento que merecía ser santo. Sin embargo, santificaron a tipos tan viles como Escrivá de Balaguer y algunos curas fascistas.
Murió en el altar, diciendo misa. Lo mataron elementos de extrema derecha, un domingo cualquiera.
En cambio, la mayoría de los obispos y demás clericalla, siempre están al lado de los poderosos, para poder vivir estupenda y cómodamente. Tienen una gran responsabilidad, y cometen, a mi parecer, un gran pecado: Han conseguido que la clase obrera odie la doctrina de paz y justicia del Evangelio; que odien a Jesús de Nazaret, quien siempre estuvo del lado de los más humildes, y murió, como Romero, por defenderlos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario