Rouco Varela da vomitera

Es el que está retratado en colorines. Es el Presidente de la Conferencial Episcopal Española, y carca notorio en todos los aspectos. Éste, de estar vivo Franco, haría como sus tocayos de las fotos antiguas, que no dudaban en saludar al dictador asesino con el brazo levantado haciendo el saludo fascista. (Es lo que yo decía poco antes, por eso el pueblo cuando se cabrea va siempre a quemar iglesias...)
Pues hace poco ha dado la campanada. Con lo que está cayendo en España, los recortes en sanidad, educación, sueldos de funcionarios de a pie, aumento del transporte publico, cada vez más gente yendo a los comedores de caridad, desahucios, etc. etc..., cuando a unas cuantas asociaciones laicas y partidos políticos, con toda lógica, han dicho que la Iglesia debería contribuír en algo pagando el IBI, por ejemplo, (que es el Impuesto de Bienes Inmuebles), Rouco se ha puesto histérico. La Iglesia Católica en España tiene bienes inmuebles por un tubo, por los que nunca ha pagado nada. Tiene más de 70.000 templos y casas parroquiales, más de 3.000 monumentos declarados bienes de interés cultural, y es poseedora de unos 30.000 inmuebles que no tienen función religiosa alguna. Pues cuando se le ha pedido al Cardenal Rouco Varela que la Iglesia arrime un poco el hombro,sólo un poco, pagando el IBi de su escandaloso patrimonio, solo en aquellos casos que los inmuebles no estén dedicados al culto, ha montado en santa cólera e ira divina (?)y ha dicho amenazante que si le hacían pagar un solo céntimo, retiraría parte de la ayuda que da a Cáritas.
Pero la "generosa" ayuda a Cáritas de la Conferencia Episcopal Española es solo el 2% del presupuesto de esta bienhechora institución.
Vaya, que si les retira su inestimable ayuda a los de Cáritas, éstos van a caer en bancarrota...
Cinismo se llama esta figura...
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La Iglesia, en vez de ser tan escandalosamente rica, y no solo en España, debería, si quiere ser creíble y respetada, (en mi modesta opinión), hacer como el Papa de la peli "Las sandalias del Pescador", donde el Pontífice interpretado por Anthony Quinn renuncia a todas las riquezas, empezando por las del Vaticano, para que sean subastadas en beneficio de los pobres.
De esta forma las iglesias no estarían vacías, y empezaría la clericalla a poner en practica -más vale tarde que nunca- el mensaje de Jesús de Nazaret.
Pero no lo harán, no, los muy malditos, hipócritas, sepulcros blanqueados, que tapan (el Papa en persona) a los clérigos pedófilos y no los separan del sacerdocio, sino que solo los cambian de diócesis, para que en la nueva encuentren niños nuevos que follarse impunemente.
Pienso que los curas deberían ser pobres (¿No han hecho voto de pobreza, castidad y obediencia?. Pues no lo parece.), empezando por el Papa, que se pasea por el mundo con una cruz de oro macizo de medio kilo al cuello y otras ricas vestiduras.
Debería la clericalla renunciar a toda posesión terrenal, como lo hizo el más grande santo que ha tenido la Iglesia, San Francisco de Asís, e ir como los monjes budistas, por ahí con una escudilla, pidiendo comida, y si se la llenan, comen, y si no, pues a ayunar tocan.
¡PERO ESTO NO LO HARAN JAMÁS, PORQUE SON HIJOS DE SATANÁS!!