¿Por qué estoy deprimido?
La Doctora Estrella Rausell, Catedrática de la Universidad Autónoma de Madrid, nos explica cuáles son los motivos que pueden llevarnos a sufrir una depresión. ¿Es culpa de quién la padece? ¿Es porque no estoy contento con mi vida?
Aunque muchas veces las personas deprimidas tienen razones para estarlo, la mayoría de las veces no son esas razones las que producen la enfermedad y algunas personas ni siquiera tienen razones para deprimirse.
Aunque muchas veces las personas deprimidas tienen razones para estarlo, la mayoría de las veces no son esas razones las que producen la enfermedad y algunas personas ni siquiera tienen razones para deprimirse.
La depresión es una enfermedad del cerebro y aunque lo que nos ocurra influye, la genética y cambios dentro del sistema nervioso parecen jugar un papel muy importante. Por ello, una persona satisfecha con su vida puede deprimirse.
En la depresión, existe una alteración de la interpretación emocional de lo que nos ocurre. Los pacientes deprimidos tienden a ver el lado negativo de las cosas y a sentirse culpables por lo que ocurre alrededor. Muchas veces sienten vergüenza de su enfermedad (aumentada por la ignorancia social sobre este problema y el injusto estigma colocado para quien la sufre) y muchas otras veces, interpretan su problema como algo generado por ellos mismos.
El cerebro está conformado por millones de células nerviosas que se interconectan, denominadas neuronas. Para que una persona pueda pensar, moverse o sentir, estas neuronas deben comunicarse entre sí. Esa comunicación consiste en el envío y la recepción de mensajeros químicos denominados neurotransmisores. Cuando la neurona libera un neurotransmisor, éste atraviesa una región de contacto denominada sinapsis y luego se une al receptor de otra neurona para transmitir la señal.
Hay más depresiones ahora, en primavera, -no sé por qué- y también en otoño. Suelen ir con los cambios de tiempo.
Hay más depresiones ahora, en primavera, -no sé por qué- y también en otoño. Suelen ir con los cambios de tiempo.
Casi todos nosotros hemos sentido alguna vez, una inmensa tristeza en nuestras vidas. Esto es normal. Pero si esta tristeza o actitud depresiva continúa por mas de dos semanas, se debe buscar ayuda. Sentir tristeza es normal, estar deprimido clínicamente no lo es.
La depresión clínica no es simplemente una angustia, es también una tristeza o melancolía permanente. Nos lleva a sentir inútiles, sin esperanza; a veces, es posible que nos querramos dar por vencidos. La depresión clínica causa pérdida del placer en la vida diaria, tensión en el trabajo y en las relaciones, agrava condiciones médicas e incluso puede llevarle al suicidio.
Con ayuda esa nube oscura desaparecerá y volverá a ver el cielo azul. El sol puede y debe brillar de nuevo para usted.
La depresión es una enfermedad tratable. Con ayuda y apoyo se puede curar.La depresión clínica puede ser tratada.
Podemos volver a tomar el control de nuestras vidas. No necesitamos vivir sintiéndonos ansiosos, tristes e irritables. ¡Tampoco necesitamos pasar noches en vela!
Cualquier persona que experimente síntomas depresivos debe ser diagnosticada y tratada.
con tan buena voluntad...Y te sientes aún peor. Pero la depresión se cura con medicamentos y psicoterapìa, porque eso de que es una "enfermedad del espíritu", ¡cuentos chinos!. Y hay depresiones flojitas que con pocos meses remiten con medicación, pero otras fuertes y que no fueron tratadas en su día, que tardan bastante en irse y que muchas veces son recurrentes a lo largo de la vida del paciente. Entonces lo mejor, y lo sé por propia experiencia, es conocer tu enfermedad, saber que de vez en cuando te vas a sentir mal pero tomarse la cosa como si fuese por ejemplo un dolor de cabeza, o de barriga, que sabes que es muy molesto pero pasa.Hay que decirse: "Ya pasará", y siempre pasa, antes o después.
Las personas con depresión floja deben ir enseguida al médico de cabecera, quien seguramente les derivará a un psiquiatra quien les pondrá en tratamiento y no se cronificará y así no se convertiran en más graves, que cuestan mucho más ser curadas. El ir al psiquiatra todavía -por lo menos en España- tiene connotaciones muy negativas, y muchos enfermos no se atreven a contarlo ni a los amigos. Yo pienso que sí se debe hacer. No es que se haya que ir a dar la brasa con nuestras penas al vecindario, o al chófer del bus, por poner algún ejemplo, pero que debe comentarse con naturalidad, como si estuviesemos yendo al traumatólogo, o al dentista. Además, si los amigos se escandalizan o asustan, es que no son amigos ni nada...
Lo que no hay que hacer es quedarse en casa lloriqueando, sino poner remedio cuanto antes, pues cuando más tarda en tratarse más paralizado está el enfermo y luego no tiene ánimos ni para ir al médico.
Las personas con depresión floja deben ir enseguida al médico de cabecera, quien seguramente les derivará a un psiquiatra quien les pondrá en tratamiento y no se cronificará y así no se convertiran en más graves, que cuestan mucho más ser curadas. El ir al psiquiatra todavía -por lo menos en España- tiene connotaciones muy negativas, y muchos enfermos no se atreven a contarlo ni a los amigos. Yo pienso que sí se debe hacer. No es que se haya que ir a dar la brasa con nuestras penas al vecindario, o al chófer del bus, por poner algún ejemplo, pero que debe comentarse con naturalidad, como si estuviesemos yendo al traumatólogo, o al dentista. Además, si los amigos se escandalizan o asustan, es que no son amigos ni nada...
Lo que no hay que hacer es quedarse en casa lloriqueando, sino poner remedio cuanto antes, pues cuando más tarda en tratarse más paralizado está el enfermo y luego no tiene ánimos ni para ir al médico.
El contacto y el cariño de los animales ayudan a recuperarse de una depresión |
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