Se abre el secreto del sumario en el caso de Asunta Basterra

El sumario del caso Asunta: la madre la asesinó y dejó su cadáver en Teo

La madre de la menor esperó a que Asunta se durmiera y la mató. El sumario no precisa en qué momento se le dieron los sedantes.

 

Rosario Porto | Archivo

 

 

LIBERTAD DIGITAL 2013-11-20

El magistrado José Antonio Vázquez Taín ordenó este lunes que se levante el secreto de sumario que pesaba sobre la causa abierta por el crimen de la niña Asunta Basterra, sin aguardar hasta el viernes, día en el que expiraba el plazo para suspender esta medida. Según informa La Voz de Galicia, el sumario revela que fue Rosario Porto, la madre de la menor, la autora del asesinato.
Rosario Porto mató a Asunta en la casa familiar de Teo. Esperó a que le hiciera efecto la elevada dosis de Orfidal que le fue suministrada después de comer y le quitó la vida asfixiándola con un objeto -todo apunta a un pañuelo que fue encontrado en la casa y que fue analizado-.
Los investigadores han determinado que el sábado 21 de septiembre, Rosario Porto y Alfonso Basterra comieron con la niña en la casa del padre. En ese piso, de la calle República Argentina, de Santiago, estuvieron los tres juntos hasta las cinco y veinte de la tarde. A partir de esa hora salieron la madre y Asunta por separado. Primero lo hizo la niña, que caminaba normal y no parecía que estuviera afectada por algún tipo de droga. Luego salió la madre, y ambas se dirigieron al piso de Porto, en la calle Doutor Teixeiro.
A eso de las seis y cuarto de la tarde, madre e hija son captadas por cámaras de vigilancia en el Mercedes verde de Rosario Porto. Una de las cámaras que graban el recorrido del coche es la de una gasolinera situada en el trayecto que conduce al municipio de Teo. La niña va erguida, y hasta el momento no se ha podido determinar si ya se encontraba bajo los efectos de los ansiolíticos que pudiera haber tomado previamente en el piso del padre -encarcelado bajo la misma imputación que su exmujer: asesinato-.
Minutos después de las seis y media de la tarde se desactiva la alarma de la casa familiar de Teo. Es la hora a la que llegan Rosario y Asunta en el coche. En esa casa es donde la investigación de la Guardia Civil sitúa el momento de la muerte de la niña.

Abandonó a la niña en la cuneta

Los investigadores consideran que la muerte de Asunta se produjo sobre las siete de la tarde, probablemente mediante asfixia mecánica, cuando la menor estaba ya vencida por la acción de las pastillas.
Rosario esperó a que se hiciera de noche para meter el cuerpo de la menor en el asiento trasero del Mercedes. Después, condujo unos kilómetros hasta el camino forestal de Cacheiras. Allí paró y sacó del coche a Asunta, cogiéndola por las axilas y dejándola en la cuneta.

El padre suministró la "dosis tóxica de orfidal"

El juez Vázquez Taín también sostiene que Alfonso Basterra fue quien suministro a la menor la "dosis tóxica de orfidal". En el auto remitido a las partes mediante el cual el instructor de la causa abre el secreto de sumario y al que ha tenido acceso Europa Press, Vázquez Taín sostiene que, en base a los resultados de la autopsia y de análisis de toxicología, a Basterra se le imputa que, "al igual que había efectuado en episodios anteriores", el 21 de septiembre fue él el que suministro a Asunta la dosis de orfidal "para privarla de toda voluntad y defensa y presuntamente facilitar la acción de asfixia, en un plan concordado" con la madre.
El juez argumenta que Rosario Porto, "en connivencia" con el periodista, drogó a su hija "al menos" durante tres meses, y que le causó la muerte "por asfixia mecánica". No obstante, apunta a Basterra como la persona que le habría dado el 21 de septiembre "la dosis tóxica" de orfidal. Así, el auto confirma que se le acusa de "aprovechar varias ocasiones que la menor pernoctó en su domicilio, para drogarla con altas dosis de orfidal". En este sentido, subraya que la propia Rosario Porto reconoció que su exmarido "tenía orfidal en su domicilio", pese a que éste habría desmentido a su exmujer.
También, en base a la declaración de Rosario, se le acusa de haber intoxicado supuestamente a la menor "al menos en una ocasión, con polvos blancos que no ha explicado de qué se trataba", añade sobre el testimonio que, según el auto, aportó la madre de Asunta.

Un calificativo hunde la imagen de padre modelo de Basterra con Asunta

La investigación judicial continúa centrada en reconstruir los últimos meses de vida de la niña asesinada y de su entorno familiar. Y en esa encuesta aparecen datos que tumban su imagen.

La imagen idílica de padre modelo de Basterra ha saltado por los aires. "La asiática". Así calificó Alfredo Basterra en al menos dos ocasiones a su hija Asunta, según declaraciones de dos personas que se quedaron sorprendidas con la palabra empleada por el periodista. El calificativo demuestra que la imagen de padre modelo proyectada por el periodista podría ser tan falsa como la de familia idílica que los Basterra Porto vendían de puertas para afuera. "Me voy a buscar a la asiática" fue una de las frases que empleó Basterra al ir a recoger a su hija el pasado mes de julio, cuando la familia ya había entrado, según parece, en crisis total. Una crisis agravada por la sufrida por Rosario Porto tras su regreso del viaje de Marruecos efectuado en junio, cuando el periplo marroquí acabó, según se baraja, en un desengaño sentimental y en un fracaso en los negocios que le llevaron a partir peras con un empresario gallego. Éste, por cierto, se ha convertido en uno de los nombres más codiciados por los periodistas gallegos. Y es que el misterioso empresario, que le habría dado nones a Porto, es clave para reconstruir los últimos meses de la abogada, hasta el punto de que también se le habría reclamado una muestra de ADN por parte de los investigadores. ----------------------- Mi madre me quiere matar”, dijo la niña en julio a sus profesoras de música La niña tenía síntomas de haber consumido fármacos en exceso Las docentes se lo hicieron saber a los padres   Asunta, la niña de 12 años asesinada el pasado sábado en Santiago, llegó el pasado 16 de julio con síntomas muy extraños a la academia privada de música de la capital gallega donde asistía a clases particulares. Dos de las profesoras que le enseñaban lenguaje musical notaron de inmediato que estaba muy aturdida y le costaba hablar. Preguntaron a la niña qué le ocurría y esta les dijo que su madre, Rosario Porto, le había dado pastillas. Y añadió: "Mi madre me quiere matar". más información La madre mantiene su versión y asegura que no mató a Asunta Muchas pruebas pero ningún móvil en el crimen de la niña Asunta Las contradicciones de la madre de Asunta llevaron a su detención Las pruebas confirman que Asunta fue drogada y atada antes del asesinato “Tengo prisa, voy a recoger a la niña” GRÁFICO La investigación del asesinato de Asunta Hallado en Santiago el cadáver de una niña de 12 años con signos de violencia Según han relatado a este periódico personas conocedoras del caso, las profesoras se quedaron muy extrañadas, sobre todo porque nunca hasta entonces habían notado nada raro en Asunta, una niña alegre y aplicada. Precisamente porque era la primera vez que sucedía algo así, decidieron contárselo solo a los padres. Allegados a la familia aseguran que era el padre, el periodista Alfonso Basterra, también detenido por el homicidio, el que siempre llevaba y traía a la pequeña a la academia. Tras conocerse el asesinato de Asunta y la detención posterior de su madre, el pasado martes, nada más concluir la ceremonia de incineración de los restos mortales de la niña, las profesoras decidieron comunicar los hechos a la policía. Acudieron el pasado miércoles a la comisaría de Santiago a prestar declaración, según El Correo Gallego, que cuenta los hechos en su edición de hoy. El Periódico de Catalunya, que también relata el episodio, informa de que las profesoras también declararon a la policía que la niña les dijo: "Mi madre es una psicótica". Las fuentes consultadas por este periódico han señalado que las profesoras se encuentran anímicamente destrozadas por no haber denunciado los hechos a la policía cuando se produjeron. Entonces se dejaron llevar por la ausencia de antecedentes y de cualquier tipo de sospechas sobre los padres, una pareja muy conocida en Santiago y apreciada por casi todo el mundo.