sábado, 7 de agosto de 2021
Yo ya no lo veré
Un conocido climatólogo ha hecho unas declaraciones que ponen los pelos de punta, sobre el cambio climático. Dice que los acuerdos de París no se cumplen nunca, porque los intereses económicos de los países sobre los que cae el mayor esfuerzo no están por la labor. Siempre priva el dinero. Y es que el ser humano está vendido a él y no quiere saber nada de lo que se avecina si haciendo algo positivo deja de ganar un céntimo.
Son unos egoístas y la suerte de las generaciones venideras (que ya están ahí...), o sea, de sus hijos y nietos, les importa un bledo. Y es ahora cuendo deberían tomarse las medidas que pueden pararlo , pues en el 2050, en tan solo 30 años, ya será demasiado tarde.
Y esto lo vemos a diario: Los polos se derriten, hay grandes sequías, inundaciones, ciclones... catástrofes tan seguidas y violentas como no se habían visto nunca.
Hace 40 años -y yo me acuerdo- ya los expertos avisaron de lo que ahora está pasando, y de lo urgente que era empezar a tomar medidas para refrenarlo. Nadie hizo caso.
Los proximos años veremos cada vez más deprisa desaparecer islas, playas, costas...
Sólo quedan 30 años 30...que pasan volando, pues el efecto invernadero ya está demasiado avanzado.
Ahora en Canadá ha habido una ola de calor como no la conocían, y ha muerto gente. En los países subdesarrollados también han sufrido de todo, pero cuando les pasa a los pobres nadie se alarma, pues se da por sentado que han venido a este mundo a sufrir.
Pero será el primer mundo el que empezará a pasarlo mal, y menos mal -pienso yo, que soy una egoísta- que a mí ya me ha cogido mayor y he podido tener una buena vida y disfrutar aún de la Naturaleza sana.
Pero la verdad es que me da mucha pena ver como se derriten los polos y que los pobres osos, y focas, etc. lo pasan tan mal, porque lo sufren en sus carnes y no entienden qué está pasando, por qué su hábitat se está deteriorando hasta el extremo de empezar a no poder sobrevivir.
Me da pena sobre todo por los animales, que también desaparecerán, pero de los humanos no me compadezco tanto, pues es culpa suya lo que ocurre. Sí compadezco a los jóvenes , y más a sus descendientes.
Yo la verdad no creo que el ser humano haga este esfuerzo decisivo para salvar el planeta donde vive. Me enfada bastante el leer que si hemos llegado a Marte es porque necesitamos encontrar planetas de recambio...cuando hemos tenido el más maravilloso de los mundos y lo hemos estropeado, como cuando a un niño se le da un juguete precioso y carísimo, y en cinco minutos ya lo ha destrozado.
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