El inefable canónigo Bruno Morey

En Mallorca todo el mundo lo conoce. Es el canónigo por antonomasia.El en su día hizo declaraciones sobre su vida diciendo que era hijo natural, -cosa que no tiene relevancia alguna- Que en el seminario se mataba a pajas.Que en Roma fué el sacerdote joven preferido de Pío XII. Confiesa que se perfumaba. Siempre ha sido un bon vivant.Un gourmet. Es rico por casa, esto lo sabe todo el mundo en la isla. Tiene una posesión fabulosa en el pueblo de Deià, llamada Ca l'Abat, donde se comercializa el agua de la fuente, del mismo nombre. Vive allí y disfruta de paisajes maravillosos, muebles suntuosos que valen millonadas, etc.Un palacio, vaya.Lleva vida de canónigo. Despierta cuando se lo pide el cuerpo, reza un poco, y se pone a leer, cosa que le gusta mucho ¡bien!. Luego come, hace la siesta, y lee cara al mar hasta la hora de dormir.No está mal.
Este señor, que ya era dueño de una considerable fortuna, se hizo de oro con las anulaciones matrimoniales más inverosímiles, como separando a parejas de casados con familia numerosa,y otras cosas y siempre cobrando no precisamente barato. Tiene una columna semanal en el diario Ultima Hora, que a mí consigue escandalizarme. A lo peor la equivocada soy yo, pero estoy hasta las narices de que dicho caballero escriba, cada siete días, sobre lo humilde que es, lo mísero y pecador que es a los ojos de Dios (en esto me parece que no se equivoca), pero el tío se vanagloria de ello, y sin pudor alguna expone al público su gran humildad. A mi me parece que los realmente humildes no desean en absoluto ser calificados como tales, e intentan pasar desapercibidos. Vaya, en resumen, que a Don Bruno yo no me lo creo. Pienso que tanto blasonar de humildad y de ser un pobre pecador no es más que soberbia. Esto me recuerda, aunque no se parezcan en nada los dos personajes, a la tumba de Juan de Mañana, Don Juan Tenorio, en la Iglesia de la Caridad de Sevilla. Quiso que lo enterraran justo en la puerta, y hay una inscripción que reza que allí está enterrado "el más grande pecador de todos los tiempos", y lo han puesto ahi para que todo el mundo que entre en la iglesia pise su tumba y lo humille. Pues a mí esto me parece arrogancia pura y dura, y si no, que baje Dios y lo vea. Teniendo en cuenta que Don Juan Tenorio, o Mañara, es un personaje mucho más simpático que Don Bruno, puede hacerse la vista gorda y reírse, pero es que Don B. tiene delito. Yo no soy quien para aconsejar a nadie, pero este señor tiene ya más de 90 años, y aunque haya llevado vida de canónigo, que como todos sabemos es vidorra y tal vez la espiche a los 100 años o más, de todas formas no le queda ya mucha cuerda, y yo le diría, desde mi pequeñez (ya estoy como él) que por el bien de su alma, si es que cree que la tiene, se ponga a bien con Dios, haga acto de contrición sincero de su vida y sobre todo de su tremenda soberbia.
Y conste que no le voy a cobrar por el consejo. Yo a veces hago cosas gratis.