Últimamente, y con todo lo que está sucediendo en Catalunya, el Sr. Rajoy, -Presidente del Gobierno de España, cosa que mucha gente sabe pero no toda- habla constantemente que Catalunya se ha saltado las leyes a la torera, y que esto no puede ser, bla bla bla...
Pero, reflexionemos. ¿Qué es una ley?. Pues una especie de panfleto con ínfulas que usan los gobernantes para que sus gobernados hagan lo que ellos quieran que hagan. Conque la Cámara tenga la mayoría queda aprobada la ley.
Pero una ley es un cachondeo que de la misma forma que se impone se deroga. O sea, que no es algo intangible como el espíritu santo, pero sí incorpóreo y fugaz.
Mi padre, que era militar y no soltaba demasiados tacos, cuando se enfadaba siempre decía: "Me cago en la ley". Sería en una de las de Franco, pero mi padre no debía ser muy respetuoso con las paridas de su jefe supremo puesto que las trataba con tan poco aprecio. Yo siempre sospeché que tenía un ramalazo ácrata, pues Andalucía la Baja siempre fue cuna de estos inteligentes seres,los anarquistas, mi padre era sevillano y antes de la guerra tenía muchos amigos de esta cuerda.. Yo, en vez de militar en el PCE de mi corazón y mis entrañas, debería haberme hecho de la CNT, pero lo mío con el PCE es una historia de amor inacabada...
Bueno, pues todo este rollo para decir que a mí, como a mi padre, no me gustan las leyes, ni me parecen respetables en absoluto.
A mí me me hubiera gustado más tener un padre anarquista que gritase aquello de "la única iglesia que ilumina es la que arde", que que fuera un milico franquista. Pero se lo perdono todo, pues mi padre era un papi adorable y encantador.
Y si hubiera sido un anarco, no hubiera conocido a mi madre, que era de Falange, e igual no nazco.
Pero, reflexionemos. ¿Qué es una ley?. Pues una especie de panfleto con ínfulas que usan los gobernantes para que sus gobernados hagan lo que ellos quieran que hagan. Conque la Cámara tenga la mayoría queda aprobada la ley.
Pero una ley es un cachondeo que de la misma forma que se impone se deroga. O sea, que no es algo intangible como el espíritu santo, pero sí incorpóreo y fugaz.
Mi padre, que era militar y no soltaba demasiados tacos, cuando se enfadaba siempre decía: "Me cago en la ley". Sería en una de las de Franco, pero mi padre no debía ser muy respetuoso con las paridas de su jefe supremo puesto que las trataba con tan poco aprecio. Yo siempre sospeché que tenía un ramalazo ácrata, pues Andalucía la Baja siempre fue cuna de estos inteligentes seres,los anarquistas, mi padre era sevillano y antes de la guerra tenía muchos amigos de esta cuerda.. Yo, en vez de militar en el PCE de mi corazón y mis entrañas, debería haberme hecho de la CNT, pero lo mío con el PCE es una historia de amor inacabada...
Bueno, pues todo este rollo para decir que a mí, como a mi padre, no me gustan las leyes, ni me parecen respetables en absoluto.
A mí me me hubiera gustado más tener un padre anarquista que gritase aquello de "la única iglesia que ilumina es la que arde", que que fuera un milico franquista. Pero se lo perdono todo, pues mi padre era un papi adorable y encantador.
Y si hubiera sido un anarco, no hubiera conocido a mi madre, que era de Falange, e igual no nazco.
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