miércoles, 18 de octubre de 2017

Los incendios en España, siempre provocados y siempre impunes

En Yellowstone a los lobos se les protege, en España están protegidos por ley, pero se les caza y se les corta la cabeza. En Galicia hay lobos. En la parte nordeste de la Península es donde más hay.




Una torre así cuesta cuatro perras.
Esta foto es de ayer. Galicia arde. Y el resto de España.

Cada año, por estos días del fin del verano en que los montes están secos porque gracias al cambio climático , que gente como Trump y todos los magnates del mundo incrementan, no ha llovido en cuatro meses o más, España arde. De Norte a Sur y de Este a Oeste. Siempre son intencionados, pero mira qué cosa, nunca cogen a ningún culpable, ni lo meten en la cárcel , ni ponen su foto en los periódicos para que todo el mundo vea su asquerosa cara. Dicen siempre, eso sí, que han sido provocados, pero ahí acaba la cosa. Y es que en España, el suelo quemado es un chollo, pues ya es terreno urbanizable.Y sirve para más cosas. Aquí lo verde estorba, lo sienten como una estupidez y un desperdicio.  España no tiene conciencia ecológica. Repito, lo verde estorba.  Cuando leo en la prensa local de Palma una carta de una señora que se queja de que una rama de un árbol urbano se le mete por el balcón (¡qué maravilla...), va el día siguiente en Ayuntamiento y lo corta. No a la rama, sino al árbol entero. Y yo cojo unos cabreos monumentales.



En los USA, en el precioso Parque Nacional de Yellowstone que tan bien cuidado está, no tienen este problema, porque tienen cada trecho unas altas torres de vigilancia permanente, y cuando el encargado que está ahí ve una columnita de humo llama enseguida a los bomberos y ahí acaba la cosa.
En este país, donde los millones de euros se gastan a mansalva en construír edificios innecesarios, para los políticos embolsarse buenas comisiones por todo, y la Seguridad Social es desastrosa, a nadie se le ha ocurrido nunca construír unas torres tan prácticas y baratas.




Será porque así no podrían hacer tan bien sus chanchullos y empobreciendo cada vez más al pueblo.
No me extraña que Catalunya quiera independizarse de esta banda de ladrones que nos gobiernan (aunque ellos cuando se ponen, son tremendos también)
Qué asco. Estoy desilusionada. Esta carta no servirá para nada, solo -y no es poco- mis seguidores en casi todo el mundo me leerán y se darán cuenta la pena que da vivir en un país tan corrupto. Pero nada cambiará.



 

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