Mi gata Moni

Moni y yo nos conocimos cuando visité un refugio para animales -en su mayoría gatos y perros- y fué el flechazo entrer nosotras.

Yo la cogí , se me puso a ronronear enseguida y le di un beso en la cabeza.

 Desde entonces todo este ritual se repite cuando vuelvo a casa y me recibe o cuando no salgo y la veo tan mona que no puedo resistirme a achucharla . Es una gatita ya vieja; tiene unos aproximadamente 15 años y es muy fuerte, por haber resistido la mitad de su vida en las calles, pasando hambre, frio y sin ningún cariño.

 En el refugio estuvo 8 años sin que nadie quisiese adoptarla, diciendo que era fea, pequeñaja y ¡Negra!. Hay racistas en todos los ambientes.

 Hay gente pa tó, como dicen los andaluces, pero es que hay cosas que parecen imposibles. En su refugio esperando 8 años su destino que la llevaría directamente a mi casa, y aunque la cuidaban muy bien, la llamaban "dimonia", que en mallorquín quiere decir lo mismo que en castellano o casi.Porque era muy traviesa. Yo se lo dejé en Moni, y Moni es la gatita "fea" que hace 3 años vive conmigo. Yo cuando la recogí pensé que me duraría 3 meses, pero ya va por los 3 años ocupando mi domicilio, y espero que haya más y mas. Aunque ya sea viejita y no se pueden esperar milagros, milagro ya es que desde que está en mi casa se le ha puesto el pelo brillante y conserva esos ojitos que han visto cuán cruel es el mundo para las pequeñas vidas como la suya. El veterinario que la vió dijo: "-Mientras coma, vivirá", y hace tres años que se cumple su vaticinio.

 Mucha gente leerá esto y le parecerá una tontería, habiendo niños huérfanos. Pero mi Moni también era huérfana -nadie conoció a la madre gata que parió- y era (es) un angelito negro que se merece todo lo mismo que los otros cachorritos, sean humanos o animales. Todos son criaturas de Dios, y aunque yo a veces me enfado con mi Hacedor y le insulto y le digo que no existe porque no se cuida de sus criaturas (esto es bien cierto, no hace nada). Luego pienso cosas que quizás no debiera escribir aquí, como que no hay Dios, que la raza humana ha sido creada por los extraterrestres, que somos su experimento, pero luego me dulcifico e intento creer que mi gata y los otros animales son proyecto de ángeles.

Nunca se apaga la sed de conocimiento en la raza humana, es un padecer y una agonía que el hombre lleva dentro desde sus primeros pasos en la tierra.

Lo que más pena me da del Evangelio son aquellas palabras de Jesús: ¡-Dios mío,Dios mío, por qué me has abandonado!!!

TERRIBLE