pieles no
domingo, 22 de noviembre de 2009
El Partido Comunista de España
Hace pocos días se clausuró el XVIII Congreso del PCE, eligiendo a José Luis Centellas como Secretario General, con el 85% de los votos y sustituyendo a Frutos. Dijo en su discurso que el PCE últimamente estaba creciendo, que sus relaciones con EU habían mejorado (gracias a Dios)(ya decía Tierno Galván que Dios no abandona nunca a un buen marxista, qué tío estupendo el viejo profesor…) y que el Partido Comunista de España tenía un pasado glorioso. Esto último ha levantado ampollas entre políticos, comentaristas y periodistas, diciendo que hay mucha sangre en ese pasado. Bueno, pues sí. No se puede hacer una tortilla sin romper los huevos. Pero eso no quita que sea verdad que tiene un pasado glorioso, al que no debemos renunciar ni renegar de él los que hemos tenido el honor de ser miembros del PC mucho antes de que se creara IU. A mí personalmente, el Partido me ha dado mucho más de lo que yo he podido darle a él. Yo, cuando era más joven, iba a pegar carteles de noche con los compañeros, participaba en las mesas electorales como interventora, tenía escaramuzas con los peperos tramposos a no poder más, y también durante unos años fui Secretaria de Organización y Finanzas (¡) del PC de Baleares.¡ Yo que solo se que dos y dos son cuatro de oídas…! aquí quiero aprovechar para agradecer a mi compa Nico Aguilera que me echase una mano (o las dos) en las cuestión de las finanzas. La parte de Organización ya me iba bien hacerla yo sola, pero lo de los números nada de nada. Además, quiero hacer constar que hicimos como decía el Che, que también lo fué de Cuba pero se cansó enseguida, porque a él, como a Durruti, al que me refiero más abajo, eso del trabajo de despacho no le iba.Bueno, pues el Che mientras fue el encargado de las Finanzas de Cuba (fue ministro, nada menos), puso un cartel en su mesa que decía: “Aquí se puede meter la pata, pero no la mano”. Pues Nico y yo ni metimos la pata ni la mano, por supuesto. Luego ya vino Izquierda Unida y salió gente a montones, más demócrata y más preparada y más de todo que yo, y pasé a ser una simple militante de IU Baleares.
Pero lo que yo quería decir con todo este rollo, es que nunca podré pagarle al PC la deuda que tengo con él, pues me enseñó lo que era la dignidad y el honor (aunque esto ya me lo había enseñado mi padre, a pesar de ser militar franquista, al César…) me enseñó lo que era la libertad, que no lo sabía por no haberla tenido nunca, y no hay peor esclavo que el que no se da cuenta de que lo es, me enseñó lo que es el trabajo por un ideal a cambio de nada material y muchas otras cosas más que las Teresianas y mi familia no me enseñaron jamás.Por eso, desde aquí quiero decir que el conocer el PCE y a mis camaradas ha sido una de las mejores cosas que me ha dado la vida y que nunca podré agradecer lo suficiente.
Pienso y pensaré siempre que la historia del PCE ha sido gloriosa y tambien sangrienta. Y que los comunistas han derramado mucha más sangre defendiendo sus ideas que cualquier otro partido. Como el PSOE, que durante la guerra y la posguerra ni se sabía de él. En cambio, los comunistas estaban organizados en células, trabajaban, se les torturaba y mataba. Y como siempre han sido peleones, nunca se rindieron.. Toma ya.
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