..pero de más pobres, ella y yo, nos hemos conocido. Concretamente, cuando ambas trabajábamos en la Delegación Provincial de Información y Turismo,en plena era franquista, con Fraga de Ministro y Soriano de Delegado Provincial.Yo entonces era funcionaria interina y trabajaba en la Oficina de Turismo de Jaime III, al lado de la Ofi de la Dele antes mencionada donde trabajaba la ínclita señora Truyols. Y yo me acuerdo perfectamente que ella era la encargada de la censura de la prensa extranjera y libros. La recuerdo perfectamente con su lapicito, azul por un lado y rojo por el otro, marcando con este último color, lo que "no podía pasar", en los periódicos extranjeros que era obligatorio llevar a la Delegación antes de venderlos en los kioscos.Cuando la prensa extranjera osaba poner verde a Franco, ella, diligente, tachaba en rojo la herejía, y ese periódico pasaba directamente a los sótanos de la Consellería.Y prohibido venderse, que si no al que lo hacía se le caía el pelo (cárcel). Y así, día tras día. También decidía sobre los libros que, procedentes del extranjero, sobre todo de Francia, llegaban a Correos y eran altamente sospechosos.Los inspectores los decomisaban y, no sé por qué, nos los mandaban a nuestra Oficina de Información. Allí, con dos señores compañeros míos, nos los repartíamos. Sotomayor se quedaba con los porno y cosas como la Justine, de Sade, y Sarmiento y yo con los políticos. Así leí yo a Marcuse, Marx, Erich Fromm y otros.Gracias a la censura mi cultura política se vio grademente acrecentada. Mientras, Merdedes , sin prisa pero sin pausa, cada mañana recibía los periódicos extranjeros y decidía sobre su suerte. Esto poca gente lo sabe, pero es que yo la conozco desde que teníamos 20 años (ella es mayor que yo, pero de las mismas quintas).Los que trabajaban entonces en la Consellería, o están muertos o son respetables amas de casa que no se enteran de nada. Pero yo sí me entero, y cuando la veo a la Mercè,en plan musa de la progresía , me entra una risa floja que es que no puedo parar...
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