Vergüenza

Yo soy poco escandalizable, pero el Papa ha conseguido que me rasgue -en sentido figurado- las vestiduras. Y es porque he oído en la radio y visto en Internet que este señor, cuando era cardenal y era responsable de los curas pedófilos de los USA, no hizo nada por apartarlos del sacerdocio y que no siguieran violando niños, sino que echó tierra encima. A Leonardo Boff, por defender la causa de los pobres, el papa polaco lo suspendió "a divinis" y lo excomulgó, por rojo.Pero por lo visto hay dos varas de medir, y es más grave ser "rojo" que encular niños. El caso es que el papa de ahora, cuando aún no lo era,no se le ocurrió prohibir a esos curas pedófilos seguir ejerciendo su ministerio y evitar que siguieran haciendo sus marranadas, sino que los tapaba y encubría. Además, hay otra cosa que me saca del tiesto y es que en varias ocasiones, desde que se están destapando estos casos en USA, Alemania, Austria y otros países, el Pontífice siempre defiende a sus asquerosas ovejas, diciendo que "son pecadores" y "que todos somos dignos del perdón". Muy bonito, sí señor, pero no ha tenido ni una palabra de compasión para las víctimas de sus "débiles" curas, para esos niños que arrastrarán un trauma de por vida.Y yo me pregunto: ¿Qué hubiera hecho Jesús (Isa para los musulmanes) de estar ahora aquí en la tierra?. No creo que hubiera consentido tener unos discípulos degenerados. Si ya se cabreó lo suyo con los cambistas y los vendedores que hacían su negocio en el atrio del Templo, que los arrojó de allí a zurriagazos diciéndoles que "habéis convertido la Casa de Dios en cueva de ladrones", pues yo no sé qué haría con estos curas violaniños, teniendo en cuenta que el pecado de los cambistas, al lado del de los curas pedófilos, a mi modo de ver, no es comparable, es peccata minuta.
¡Ay, Diosssss!!