La arroba, este símbolo que hoy se asocia a la Internet, está tan de moda como la propia red, ya que se le utiliza para evocar la modernidad y la era digital, aunque en sus inicios fue una popular medida de peso y volumen que tuvo su origen en la Andalucía previa al siglo XVI. Viniendo dicha palabra del árabe "AR-ROUB" o "AR-RUBA", que significa cuarta parte.
Por lo que se supone que esa medida pudo estar en uso desde cientos de años antes, a pesar de que la primera documentación escrita sobre la misma hace referencia a la medición de las mercancías que eran transportadas en los viajes trasatlánticos que hacían ruta entre América y Sevilla (ahora la arroba vuelve a recuperar su vocación navegante, pero en el ciberespacio). Ya en aquella época se usaba el símbolo @ como "abreviatura" o suficiente expresión escrita de la medida. De igual manera, el símbolo era usado también para indicar el precio unitario, y así se usaba la arroba para referenciar el precio de cada medida ("arroba") de mercancía.
Esto permitió que este símbolo sobreviviera en los teclados de las máquinas de escribir y posteriormente en las computadoras, hasta que Ray Tomlinson -creador del sistema de correo electrónico, en 1971- usó este carácter como una forma de combinar la identificación de usuario (nombre) con la identificación del servidor o computador de gran capacidad (ejemplo.com) que alojaba la cuenta de ese usuario para separar y distinguir ambas partes. Con lo cual convirtió a la arroba en el símbolo más representativo de la era digital.
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