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Pieles NO

viernes, 15 de noviembre de 2013

Los almogávares


PARA ENTENDER TODO ESTE LIO
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La historia de España es un poco complicada, y cuando se conoce se da uno cuenta de por qué sus habitantes son tan diferentes. Un catalán, por ejemplo, no tiene nada en comun con un extremeño, ni un navarro con un andaluz. Los franceses, italianos...son más parecidos entre sí, aunque haya diferencias entre sures y nortes. Pero es que en el -mal- llamado reino de España cada uno tira por su lado.
Isabel y Fernando, los Reyes Católicos 

Esto es debido a que hasta la forzada unión de reinos tan dispares por la boda de los reyes Católicos se pasaban el tiempo peleando unos contra otros.
La boda de los llamados "Reyes Católicos", pòrque habían expulsado a los últimos árabes de la Península, conquistando el reino de Granada, fué un enlace político. Fernando era rey de Aragón, cuyos estados eran, además de éste, Cataluña, Valencia, las Baleares, el Rosellón,  y la Cerdaña (estos dos en el sur de Francia), el Alguer (en la isla de Cerdeña) y los territorios de Italia (ver mapa). Castilla aportaba el resto, y entonces la pareja se dedicó a bajarles los humos a los señores feudales, poderosisimos, desmochando sus torres y almenas y a lo bruto más bien.
La reina Isabel era una beata meapilas mediatizada por el Cardenal Cisneros, y más fea que Picio, y el rey Fernando un aragonés cazurro, inteligente y mujeriego. Un rey renacentista.
Al pricipio del s.XIII una princesa aragonesa llamada Petronila se casó con con el Conde de Barcelona (Cataluña no tenia reyes; era un condado)Ramón Berenguer IV, y al tener un hijo, Alfonso el Batallador, éste heredó los reinos de sus padres, que quedaron unidos por la enseña de las cuatro barras rojas sobre fondo amarillo , comunes a todos los territorios de la Corona de Aragón.

Petronila y Ramón
La enseña de las cuatro barras de sangre dice la leyenda que la inventó un caudillo catalán llamado Wifred el Pilós (Wifredo el Peludo), que, agonizante, cuando sus hombres se quejaban de no tener enseña, mojó los cuatros dedos de su mano en su sangre y las pasó de arriba abajo por un escudo amarillo  que tenía cerca, diciendo: -"¡Aquí teneis vuestra bandera!".Así se creó el escudo de las cuatro barras de sangre. Si es verdad o no, no se sabe, pero es bonito.
Más tarde nació el rey más carismático del reino, Jaime I llamado "El Conquistador". Además de territorios, conquistaba señoras, porque era muy alto para su época, rubio y cachas. Sus aventuras amorosas son muy divertidas, para otro post.
Fué el primer rey de Aragón con ese nombre, y triplicó la extension de sus estados. Conquisto Valencia a los moros y durante su reinado el Mediterráneo se convirtió en un mar catalán, donde se comerciaba y se maldecía en catalán. Hasta se decía que los peces llevaban en la cola las cuatro barras.
Roger de Lauria,un caudillo almogávar, conquistó Sicilia para la Corona.


Roger de Lüria, o de Lauria, para los castellanos
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La Corona de Aragón es el nombre que recibe la unión del Reino de Aragón y el Condado de Barcelona, englobando al conjunto de hombres y territorios que estuvieron sometidos a la jurisdicción del rey de Aragón. Más tarde, por conquistas de nuevos territorios, esta corona incluyó al Reino de Mallorca, Reino de Valencia, Reino de Sicilia, Reino de Córcega, Reino de Cerdeña, Reino de Nápoles, Ducado de Atenas, Ducado de Neopatria, Marquesado de Provenza, Condado de Rosellón, Condado de Cerdaña y el Señorío de Montpellier.


Alfonso el Batallador, rey de Aragón



¡Desperta ferro! La lucha de los almogávares

Mientras el reino de Castilla se ocupaba en mandar barcos y más barcos a la América "descubierta", que volvían llenos de oro robado a los indígenas, los aragoneses se dedicaban a reconquistar el Mediterráneo, y el Mare Nostrum de los romanos se convertía en un mar catalán, con peces catalanes.
El reino de Aragón estaba compuesto por Aragon, Cataluña, Valencia, las Islas Baleares (Mallorca, Menorca, Eivissa, Formentera y Cabrera)y el Rossellón y la Cerdanya en el sur de Francia. (ver mapas, que a veces me lío)

Escudo del reino de Aragón
Aun cuando se desconoce el origen exacto de los almogávares, sabemos que se trataba de un grupo de hombres -catalanes,valencianos, mallorquines y aragoneses- organizados militarmente que ofrecían sus servicios a cambio de importantes recompensas. Su ferocidad, bravura y crueldad en el campo de batalla están presentes en todas las descripciones que se hacen de ellos. La verdad es que eran unas tropas mercenarias que se enorgullecían de ser los más brutos del Mare Nostrum. Pero eran nacionalistas, y todas sus conquistas pasaban a engrosar los territorios de la Corona de Aragón.





¿Almogávar?

La denominación “Almogávar” tiene su origen en la palabra árabe “Al-mugawir”, que quiere decir “penetrar en territorio enemigo”. Esta palabra sirvió para designar, de manera genérica, todas aquellas tropas que, como una guerrilla, saqueaban un territorio enemigo mediante incursiones veloces.


Alfonso el Batallador


Roger de Flor

Roger de Flor (1262-1305), aventurero y militar, fue el líder más famoso de los almogávares.
Roger fue admitido en la orden militar del Temple para luchar en las cruzadas. Abandonó los templarios y se puso al servicio de Federico III como corsario. Capturó varios barcos y pasó a formar parte de la Compañía de los almogávares, que siempre luchaban bajo la bandera de las cuatro barras.
En 1303, después de conseguir la conquista de Sicilia, Roger de Flor ofreció su ayuda al emperador griego Andrónico II, entonces amenazado por los turcos. Éste la aceptó y lo nombró mega duque del Imperio. Las tropas de los almogávares hicieron una tremenda escabechina con los pobres turcos, que huían despavoridos ante aquellos demonios.  Roger de Flor fue nombrado césar del Imperio por Andrónico II, y sus leales soldados se quedaron con las turcas viudas.
El poder que había conseguido en Bizancio suscitó el recelo del hijo del emperador (Miguel IX). En un banquete en Andrinópolis, Miguel lo hizo asesinar junto con su escolta por tropas alanas. Este fue el inicio de la Venganza Catalana.
Roger de Flor, principal caudillo almogávar

Estatua de Roger de Flor

Ramon Muntaner

Raimon Muntaner (1265-1336), cronista y militar catalán, acompañó a los almogávares en la expedición a Oriente en 1303 y tomó parte en las campañas catalanas en Asia Menor y en Tracia. Además, fue capitán y administrador en Galípolis.
El papel que desarrolló Muntaner lo convierte en un testigo de excepción. Gracias a él contamos hoy en día con la única fuente que explica la expedición catalán-aragonesa a Oriente.
Muchas veces se asustaba ante lo que veía, pero todo lo escribía.
El relato sobre la expedición almogávar forma parte de la Crónica, una brillante narración casi periodística que explica la historia de los Países Catalanes desde el reinado de Jaime I hasta la coronación de Alfonso el Benigno (1327). El estilo personal y emotivo, la prosa fluida y viva, y el uso de la lengua rica y coloquial, convierten la obra de Muntaner en una de las más atractivas de la literatura catalana.

Crónica de Raimon Muntaner

La respuesta no se hizo esperar, los almogávares arrasaron Tracia hasta llegar a Macedonia. La sed de venganza almogávar no dejó ni un rastro de vida por dónde pasaron. Es más, hasta la actualidad, mediante la memoria colectiva, han llegado expresiones como “Así te coja la venganza catalana”, “Ni un catalán haría tal cosa” o “¡Qué catalán!” para subrayar el salvajismo y brutalidad de una acción.
Estaban tan furiosos los catalanes por el asesinato de sus jefes, que asolaron Grecia de norte a sur, y como buenos catalanes a quienes no gustaban los desperdicios,mientras fundaron los ducados de Atenas y Neopatria, donde vivieron durante tres generaciones, casándose con mujeres bizantinas.
Toda  esta epopeya bélica de los Almogávares, tan interesante y divertida, nunca se ha enseñado en España a los niños en las escuelas. A mí, como era en tiempo de Franco, solo me enseñaron la historia de Castilla, y la "labor evangelizadora y civilizadora de los españoles en América". Madre mía.
Después de imponerse sobre Berenguer de Entença, Bernat de Rocafort fue elegido el nuevo caudillo. Su tiranía, hizo que, pasado un tiempo, se agotara la paciencia de los Almogávares y decidieran entregarlo al enemigo.
A partir de aquel momento, sin un líder evidente, la Compañía se rigió por el “Consejo de los doce”. Mientras tanto, las ofertas de trabajo no dejaron de llegar.
Asedio a Constantinopla

Venecia
 

Entença

Berenguer de Entença (?-1307), cuñado de Roger de Llúria, fue un noble y militar catalán que luchó a las órdenes de Jaime II.
Como representante de Jaime II, dirigió una fuerza expedicionaria que se incorporó a la Compañía Catalana de Roger de Flor (1304) para ayudar al emperador bizantino contra los turcos.
Era un guerrero muy bien considerado entre los almogávares, motivo por el cual Roger de Flor le dio el título de Megaduque tras derrotar los turcos.
Cuando Roger de Flor murió, Entença logró el mando de la Compañía Catalana y declaró la guerra al Imperio de Andrónico iniciando la célebre Venganza Catalana. En esta guerra, Entença fue capturado, aun cuando gracias a las gestiones de Jaime II fue liberado al poco tiempo.
En su ausencia, sin embargo, Rocafort logró el liderazgo de la Compañía y Entença se vio relegado a un segundo término. Las disputas entre Rocafort y Entença fueron continuas y acabaron con la muerte del segundo a manos de uno de los hermanos de Rocafort el 1307.




Los Almogávares contra la alianza europea

Unos años más tarde, los Almogávares se introdujeron en Tesalia, un territorio en manos de los Francos desde la 4ª cruzada, y fueron contratados por Gautier de Brienne, duque de Atenas, para repeler a los griegos. Nuevamente, la Compañía resolvió la batalla brillantemente pero, en terminarla, los Almogávares descubrieron que no sólo no los querían pagar, sino que los expulsaban de Atenas.
Las presiones de la alianza Venecia-Constantinopla sumadas al deseo de Gautier de Brienne de poner fin a la Compañía que iba camino de convertirse en una leyenda reunieron lo mejor de lo mejor de la caballería europea. Los años 1311, con el único objetivo de aplastar a los Almogávares, se enfrentaron 3.000 caballeros acompañados de 12.000 soldados de infantería armados de la mejor manera posible en la época. Contra todo pronóstico, y por insólito que nos pueda parecer, los grandes caballeros europeos no pudieron ganar a los Almogávares. Aquel enfrentamiento ha pasado a la historia como la mítica batalla de Cefís.

El estancamiento almogávar en Grecia

La derrota supuso el fin de la dominación franca en Grecia y, lo más curioso de todo, el establecimiento durante tres generaciones en aquellos territorios (ducados de Atenas y Neopatria) de la Gran Compañía Catalana. Los catalanes impusieron las leyes imperantes en la Corona de Aragón e instituyeron el catalán como lengua oficial.
Lejos de ser sólo un ejército, los almogávares constituyeron un organismo vivo que evolucionó y se supo adaptar a diferentes situaciones.


Palacio de los reyes de Mallorca en Perpignan

 
EL DECLIVE
 
La falta de una estrategia política coherente y las conspiraciones de algunas familias locales hicieron retroceder el dominio catalán-aragonés. Por otra parte, los antiguos enemigos de los catalanes no olvidaban; las acciones de genoveses, servios, albaneses, franceses o florentinos menguaron el poder almogávar hasta que, finalmente, en 1390, como consecuencia de un asedio de quince meses, los Almogávares perdieron las pocas posesiones que les quedaban en Oriente.









Rocafort

Bernat de Rocafort (?-1309) fue un caudillo almogávar de origen catalán.
En 1282 participó en la campaña de Sicilia y en 1304 condujo una hueste a Asia menor, dónde pasó a formar parte de la campaña de Roger de Flor. Por el valor demostrado en el campo de batalla, Roger de Flor lo nombró senescal y le prometió con su hija.
Tras la muerte de Roger y del encarcelamiento de Entença, Rocafort se convertió en el líder de la Compañía Catalana. Cuando Entença volvió, se rompió la unidad militar: Rocafort no quiso reconocer el liderazgo de Entença y gran parte del ejército almogávar apoyó a Rocafort.
Con el tiempo, Rocafort se convirtió en un líder ambicioso y tirano que antepuso la ambición personal a los objetivos políticos y económicos de la expedición. Pretendió reinar en Salónica y se puso al servicio de Carlos de Valois y de Gautier de Brienne, duque de Atenas. Sus propios hombres lo entregaron a Robert de Nápoles, un antiguo enemigo, que lo encerró en el castillo de Aversa, dónde murió de hambre.

“L'exèrcit errant”

Aprende sobre la historia de los almogávares de forma amena y entretenida con este cómico que relata la última gran batalla de la Compañía de los Almogávares.
Editorial: CUMBRE (2005)
Parte de este escrito es de Catalina Rúa.2006. La mayoría es mía.La Loles

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo de los "peces catalanes" me ha llegado al corazón. Me recuerda una visita a un pueblo donde un cartel rezaba: "fuente socialista".

Mª Dolores de Burgos dijo...

No, bobito. Lo que yo quise decir -y dije mal- no es que los peces del mediterráneo fuesen catalanes, sino que aquí hay unos pececillos que tienen sobre el lomo unas rayas rojas parecidas a la bandera catalana, y entonces se decía que "hasta los peces del Mediterráneo eran catalanes". Claro que da risa, y espero otra vez haberme expresado mejor.