Fotos en diversas ciudades de España en apoyo a Garzón. Mucha gente acude a ellas con fotos de familiares asesinados por el franquismo en los años 60 y aún más tarde, y cuyos cuerpos no saben donde están.
El juez Baltasar Garzón fue condenado este jueves por un delito de prevaricación a 11 años de inhabilitación por ordenar las escuchas entre los cabecillas de una trama de corrupción y sus abogados, informaron fuentes judiciales.
La sentencia entierra prácticamente la carrera en la magistratura de Garzón, un hombre que puso contra las cuerdas al dictador chileno Augusto Pinochet y decenas de represores argentinos.
La acusación había solicitado entre 10 y 17 años de inhabilitación por haber vulnerado su derecho de defensa al haber intervenido las comunicaciones en prisión entre algunos abogados del "caso Gürtel", trama vinculada al Partido Popular (PP, centro-derecha) y sus clientes.
Garzón dijo durante el juicio celebrado en el Tribunal Supremo el mes pasado que ordenó intervenir las conversaciones al considerar que podría existir connivencia entre los abogados y sus clientes para esquivar del alcance de la justicia española "millones de euros" ocultados en el extranjero.
El juez español, de 56 años que en el llamado caso "Gürtel" destapó una trama de corrupción en la administración pública aún espera la sentencia en el juicio que finalizó el miércoles por su investigación de los crímenes del franquismo.
Es inaudito que unos jueces corruptos y amigos de asesinos franquistas condenen a otro juez por investigar precisamente esos crímenes.
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