Pintada sobre fondo negro, la chica tiene la cabeza girada, y con los labios entreabiertos mira hacia fuera del retrato. Tanto sus ojos como su boca están resaltados con delicadeza gracias a unas pinceladas en blanco y rosa. La luz que se refleja sobre su pendiente de perla en forma de lágrima se consigue gracias a una capa gruesa de "impasto". Su traje dorado y sencillo no ofrece ninguna pista sobre el lugar o la época a los que pertenece, pero el turbante que lleva sobre la cabeza le concede un innegable toque de exotismo. Tanto uno como otro son ejemplos claros de la habilidad de Vermeer para representar los pliegues de los tejidos.
"La muchacha de la perla" es uno de los tres o cuatro retratos de tamaño busto que realizó Vermeer, Lo más probable es que fuera concebido como un "tronie", un tipo de pintura que también ejecutaba Rembrandt, en el que una característica o una expresión determinada se anteponía a la fidelidad al parecido con el individuio en cuestión. También es probable que se ejecutara como obra secundaria, o pieza de acompañamiento para "Retrato de una mujer joven", de Vermeer, conocido como "La muchacha Wrightsman", actualmente en el Museo Metropolitano de Arte en Nueva York.
Algunos han hecho conjeturas sobre si la modelo del cuadro era la hija mayor de Vermeer, Maria. Otros, sin embargo, consideran que se trata de Magdalena, la hija del jefe de Vermeer, Pieter van Ruijven. Tracy Chevalier, la autora del best-seller "La joven de la perla", imaginó que la chica era Griet, una sirvienta de la que Vermeer se enamoró. También hubo una versión cinematografica.
El misterio que rodea la identidad de la mujer también ha contribuído a incrementar el aura que rodea el trabajo, que salió a la luz en 1881, cuando el coleccionista de arte Arnoldus Anfries des Tombes lo compró en una subasta por dos florines. En su testamento legó la obra al Mauritshuis. en La Haya, donde ha estado expuesto desde su muerte en 1902.
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| Este cuadro no estoy segura si es el de "La muchacha Wrightsman", o la Magdalena de Caravaggio. Si alguien lo sabe, porfa que me corrija. |
Como señaló con agudeza el crítico de arte Jan Veth, es como si el cuadro de La Muchacha de la Perla se hubiese hecho "a partir de polvo de perlas aplastadas".
Marilyn Chandler McEntyre escribió una colección de poemas basados en las obras de Vermeer que se titula "Quiet light"; en ella se incluye un poema titulado "Chica con pendiente de perla"
En 1994 se realizó una restauración a fondo del cuadro antes de enviarlo a Washingtpon para una importante retrospectiva sobre la obra de Vermeer.
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