pieles no
miércoles, 4 de noviembre de 2009
Para no engordar
De pequeñas, a muchas niñas (y niños) les enseñaban sus padres que debían terminarse todo lo que había en el plato, y a veces eran raciones muy grandes . Esta orden luego de mayores puede crear sentimientos de culpa, por lo que es mejor ponerse poca cantidad, sólo lo que a uno le apetezca. Y dejarlo cuando ya se está harto. Lo de comer a horas prefijadas es una tontería. No lo digo yo, lo dicen muchos nutricionistas. Deberíamos comer solo cuando tenemos hambre, y parar cuando estuviesemos saciados. No comer entre horas. ¡El picoteo es fatal!.Comer 5 veces al día y poco.No pasar hambre, pero suprimir los fritos, las salsas y todo lo que tiene grasas animales.Y es que comemos demasiado.
Suprimiendo un copioso desayuno y tomando solo un café con leche con dos cucharaditas de azúcar se puede adelgazar más de un kilo al cabo de unas semanas. (A menos que se sea picapedrero, albañil o campesino en época de siega o tenga que cavar una zanja)
Tampoco es cosa de renunciar a todo lo que nos gusta, sino comerlo menos frecuentemente.Los niños españoles, como no hacen ejercicio y comen mucha bollería y comida basura, están engordando preocupantemente. Luego serán adultos obesos, y ser obeso trae muchos problemas: Estropea las piernas por el peso que tienen que aguantar, hay mala circulación, colesterol y un montón de pejigueras más. Antes los niños corrían mucho cuando jugaban, ahora se pasan las horas quietos delante de la TV o con las dichosas videoconsolas.Y merendaban con pan y una porción de chocolate, jamón, chorizo o queso. Ahora los bollycaos y meriendas preparadas son más cómodas para las madres, pero engordan una barbaridad. Un niño sano tiene que estar delgado.Eso de los niños gordos, qué bonitos y que sanos parecen, estaba bien en tiempos en que se pasaba hambre, pero ya no. Ahora en el Primer Mundo es raro que la gente pase hambre.
Aprovechando que digo esto,pues sí que la hay que pasa. El otro día leí en la prensa que a causa de la crisis dichosa, los robos de comida en los supermercados se habían duplicado. Y pienso que quien roba para comer, no comete delito.La culpa la tiene la sociedad, que no puede alimentar a sus miembros. Pero también hay mucho listo que roba comida y luego la revende más barata a bares y restaurantes. Y es que la picaresca es infinita.
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