La tortilla estuvo en el punto de mira de los debates teológicos de la Edad Media. El problema en cierta manera era científico: ¿era el huevo parte del animal y por lo tanto carne, o era un alimento ajeno a la carne?.El debate se producía para saber si la tortilla rompía o no el ayuno cuaresmal y los viernes de vigilia.
El asunto trata de resolverse en el Concilio de Aquisgrán (917) donde se afirmó que era carne y por lo tanto no debía comerse en días de abstinencia. Parece ser que no todos estaban conformes con esta decisión e incluso dentro de la propia iglesia aparecen voces discordantes. Santo Tomás de Aquino se convirtió en defensor teológico de la tortilla indicando que esta no rompía el ayuno.La victoria final fué debida al papa Julio III, en 1553, declarándola como alimento válido para los días de vigilia, e incluso para los días santos de Cuaresma.
1 comentario:
Es un ejemplo magnifico de los lios q se ha montado la cultura occidenta. Creamos categorias para aprehender la realidad ..y acabamos confundiendo la realidad con las categorias. El remate es montar concilios sobre si las tortillas son carne, un debate tan complejo como inutil.
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