La isla de Mallorca, donde yo resido, es el destino favorito de los alemanes. Últimamente están un tantico bestias, pero siempre han tenido una tirada hacia la isla.
Hace ya muchos años, el Gobierno alemán hizo una propuesta al español para comprarla, completamente en serio, pero aquí se tomó a cachondeo y el Gobierno español me parece que ni contestó. Yo tuve un disgusto, pues Mallorca siempre ha sido caótica, como buena isla española. Se dice que, de las Baleares, Menorca es la más europea, Ibiza (o Eivissa) la más africana, y Mallorca la más española. Y por este motivo, aquí florecen todos los defectos típicos del país. Corrupción,basura, caos, ausencia de sentido común...
Por eso a mí me gustaría mucho que aquí gobernasen los alemanes, que perfectos no lo serán, pero menos corruptos, más organizados, más celosos del medio ambiente y otras muchas cosas, pienso que sí. Además, yo eso de las patrias nunca me ha tocado ninguna fibra delicada de mi organismo, o sea que en cuestión de banderas, tant se me'n fot. (traducción del catalán: Me importa un carajo) (ven como en todo, hasta en las traducciones, los españoles son los más bastos?)
Dicho esto, me he quedado más a gusto, y si he molestado a algún patriota de algún escalafón, pues lo siento mucho.
He tenido una madre catalanista (qué bien lo debería estar pasando ahora...), un padre sevillano, que, aunque militar, decía que él era de Al Andalus, y yo, que nací en Zaragoza, soy maña y nada más.
Ele. Ahí queda eso. Que yo, aunque poco española, soy más chula que un ocho.
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