El Blog de la Loles Independiente 2: Una historia de España

Basílica de San Isidoro en Sevilla

San Isidoro

San Isidoro de Sevilla -que nació en Cartagena hacia 560- es una figura imponente de la Alta Edad Media. Era un erudito que hablaba varias lenguas y dejó una importante obra literaria. Fué un gran político y estuvo activo hasta su muerte en 636.
Siguiendo los pasos de San Leandro, su predecesor como obispo de Sevilla, Isidoro funda escuelas dentro de las catedrales, donde se enseñaba teología, derecho, medicina y las artes. Antes que Averroes, introdujo en España el pensamiento aristotélico.
Su obra escrita es inmensa, e impropia de este aún oscuro siglo. Sus "Etimologías" son toda una enciclopedia, tratando de temas diversos; También escribió una historia de los bárbaros que invadieron la Península . Su sabiduría brilló en toda Europa y fué el escritor latino más leído y copiado en la Edad Media.
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Leandro de Sevilla (Cartagena, c. 534-Sevilla, 13 de marzo de 596), obispo católico y Santo nacido de una notable familia hispanorromana. Su padre era hispanorromano, y su madre era, supuestamente, visigoda, incluso se ha dicho que fuera hija de Teodorico, rey de los Ostrogodos, pero esto debe de ser falso, puesto que los matrimonios mixtos estaban prohibidos. Fue hermano de San Isidoro. Su padre se llamaba Severiano o Severino y se le adjudica el título de dux (si bien su hermano Isidoro menciona que era simplemente un ciudadano), y su madre era Teodora o Túrtura. San Leandro es reconocido, porque fue el que consiguió que se convirtieran al catolicismo las tribus visigodas que invadieron España y que su rey Recaredo I se transformara en fervoroso creyente.
Y también es simpático para mí porque -esto no se sabe cierto- dió nombre al dulce más estupendo que se puede encontrar en Sevilla, las famosas "yemas de San Leandro", que cuando voy a esta preciosa ciudad, único lugar donde todavía tengo familiares, no dejo de pasar por el Convento de San Leandro a comprar una caja, que me dan por el torno. Las recomiendo a los golosos.

Las yemas, de huevo hilado, en su cajita de madera (hay cajas de varios tamaños y precios)

Están para comérselas

San Leandro de Sevilla

Historia del conde Don Julián, su hija, Don Rodrigo y el moro Muza (Musa bin Nosair)
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El reino visigodo en España se iba derrumbando, por el descontento, la desidia. Era a mediados del s.VII. Don Rodrigo era el cabecilla de los descontentos con el rey,y Witiza quería hacerle prisionero para sacarle los ojos, como había hecho con su padre . Don Rodrigo le ganó en una batalla y, ni corto ni perezoso, le hizo sacar los ojos, vengándose .
Después de ésto, Don Rodrigo fué proclamado rey. Recordemos que entre los bárbaros los reyes no reinaban de padres a hijos, sino que eran elegidos por los soldados por ser los más valientes y "tener buen seso", como se decía entonces de la gente inteligente.

Don Rodrigo en la batalla de Guadalete

Don Rodrigo espìando a Florinda "La Cava" mientras se baña

Lo mismo de arriba, pintado por Winterhalter

Corría el año 710.Don Rodrigo se dedicó a perseguir a los hijos de Witiza, que se fueron al norte de África, que hervía de follones.
Entonces era costumbre que los nobles enviaran a sus hijos a educarse en la Corte, Así, además de aprender modales y algo de cultura general, se conocían entre ellos y estas amistades podían ser muy útiles en su futuro o que de allí salieran bodas. Vaya, como se hace ahora en la monarquía española, solo que aquí organizaban cruceros por el Mediterráneo, donde el rey emérito Juan Carlos conoció a una chica llamada Sofía.
El conde Don Julián llevó a la corte de Toledo a su hija Florinda, bellísima muchacha.Fue (por eso?) elegida, de entre el séquito real , para el servicio personal de Rodrigo, encomendándosele la delicada tarea de extraerle la sarna, operación que realizaba con un alfiler de oro. Tanta intimidad acabó con la violación de Florinda, quien, indignada, escribió a su padre contándole la cosa. El conde Don Julián fué a buscarla a Toledo y se la llevó con él a Ceuta (Sebta, en árabe)
Hay que decir que los cristianos no se lavaban nunca, y así tenían sarna, tiña, lepra o al menos una enorme costra negra. No se lavaban porque sabían que los árabes se lavaban mucho, y para llevar la contraria, ellos nada. Además consideraban pecaminoso el bañarse. El mismo Cid Campeador presumía de haberse lavado solo en dos ocasiones: Cuando nación, que le lavaron,y al casarse .

Algeciras y el Peñón de Gibraltar

Algeciras

Musa ben Nosair( El moro Muza)

El conde, decidido a vengarse, se puso en contacto con Muza (Musa ben Nosair) el gobernador musulmán de la región, contra quien se había enfrentado a menudo.Le explicó que los godos de la Península se llevaban fatal, que estaban todos peleados, y le dijo que con su ayuda y la de los hijos de Witiza podrían invadir la Península y conseguir un gran botín. Muza pidió permiso al califa, y, ya con eso solucionado ofreció al conde Don Julián la ayuda del comandante Tárif ben Maluk, con cien caballeros y 300 peones.
El conde Don Julián y su tropa, ayudados por los musulmanes , desembarcaron en Gibraltar, para, acto seguido, saquear Algeciras. y otros lugares de la costa. Y regresaron con el botín.
En vista del éxito de la expedición, Muza amplió la ayuda a Don Julián, Esta vez con 12.000 guerreros.El conde y Tarif llevaron a las huestes en naves de mercaderes, para no llamar la atención de los godos.
El rey Rodrigo, cuando se enteró, envió contra los invasores a su sobrino Iñigo , quien sería derrotado varias veces hasta morir en combate. Las tropas invasoras llegaron a Sevilla,y después de saquear todo lo que encontraban a su paso, regresaron a Africa. Reunidos Muza, Tarif y el conde, decidieron hacer una nueva incursión. Los hijos de Witiza habían regresado a la península.
El ejército musulmán cruzó el estrecho y se dirigió a la rica vega del Guadalquivir, donde, una vez más, saquearon las tierras. Luego se dirigieron a Jerez, enterados de que Don Rodrigo avanzaba desde el sur, con un ejército de 100.000 hombres. Ambos ejércitos se situaron en ambas orillas del rio Guadalete,. El gran ejército visigodo, a lo largo de una semana de lucha, llegó a matar a unos 16.000 moros.Tarif, preocupado, solicitó entrevistarse en secreto con los dos hijos de Witiza, que encabezaban las dos alas del ejército de Don Rodrigo. Durante la reunión, Tarif les ofreció la corona real si desertaban en la batalla. El día 11 del mes de Chaual se produjo el choque definitivo.
La mayoría del ejército que salió de Africa estaba compuesto por bereberes. y otros arabes.
Estos hijos del desierto, con una fuerza impresionante, exaltados por las prédicas de su Profeta, consiguieron liquidar todo un reino godo-romanizado.
Tarik dió su nombre a Gibraltar (Djebel-Táriq) y Tárif a Tarifa, también en el estrecho.