pieles no
viernes, 28 de agosto de 2009
Exorcismo en Connecticut
Ayer fuí a ver esta peli de miedo, y me gustó. No es de las mejores, pero vaya, pasé un buen rato. Para mí la mejor ha sido y es "El Exorcista", y después "El Resplandor". Cuando era adolescente me daban mucho miedo estas pelis, pero después comprobé que la vida es mucho más terrorífica, y me hice fan de esta clase de films. Yo la verdad es que no paso miedo, porque ya me sé todos los trucos, pero disfruto la mar. Esta trata de una familia pobretona con un hijo adolescente que tiene cáncer.Se van a vivir a una casa estilo Psicosis, que antes había sido una funeraria y está llena de malas impregnaciones.El resto ya os lo podéis figurar.
Yo también he vivido en casas con malas impregnaciones. Como me he tenido que mudar muchas veces, la primera de Zaragoza a Palma, y en Palma he ido cambiando de domicilio hasta tener el piso en que vivo en propiedad, he pasado por muchos lugares. Recuerdo uno sobre todo, que había sido habitado varias veces (lo que propicia que tenga impregnaciones negativas y de todo tipo, la casa en que vivimos ahora era nueva y solo la hemos podido impregnar nosotros con nuestras vivencias), pues como iba diciendo, estuvimos durante bastantes años en un piso en que había vivido mucha gente, de alquiler, y pasaban cosas raras.Por ejemplo, de pronto se ponía a oler a m... en el recibidor, cuando por allí no pasaba ninguna cañería y el techo y las paredes estaban completamente limpios...y yo iba al WC y allí no olía a nada...Pero en el recibidor, aquello parecía si cerrabas los ojos que estabas en un vater de la India, y no había nada que pudiera provocarlo. Ya hice mis averiguaciones con vecinos y ná de ná... cesó cuando quiso. Y otras cosas.Podría escribir un libro. En la casa en que viví con mis padres hasta que me casé,allí sí que pasaba de todo.Si no me creen me es igual.Por ejemplo, aparecieron de pronto un día las huellas de pisadas de zapatos de hombre ¡en el techo de la entrada a la casa!. Todos los vecinos tuvieron que verlo, pues eran muy evidentes. Estuvieron allí varios meses hasta que encalaron el techo y las paredes. A mí me han pasado muchas cosas raras, pero llegó un momento en que ya no me daban miedo, al contrario, me divertían. Y ahora, que me vengan con peliculitas de terror... La vida sí que es terrorífica cuando se pone borde...lo demás, cuentos de niños. (que también, no sé por qué son bastante inquietantes...)
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